Año CXXXIV
 Nº 49.187
Rosario,
martes  24 de
julio de 2001
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cartas
¿Recordar, comprender?

¿Recuerdan aquella inflación que comenzó en 1946 desvalorizando progresivamente el peso moneda nacional que desde 1885 era nuestra moneda de curso legal? Devaluación que se intentó frenar en tres oportunidades sin resultado alguno. Y desde ahí fue tan arrasadora la inflación que en junio de 1989 mil millones de australes eran del mismo valor que un solo peso moneda nacional de curso legal. Cuánta incertidumbre y desesperanza: no comprendíamos que un gobierno fabricara moneda argentina sin respaldo y usándola sin control, comprometiendo al país y forzando a sucesivos gobiernos a continuar devaluando nuestro peso moneda nacional para seguir "manteniendo" al país y tal vez comprendiendo que aunque estaban hipotecando el futuro de la Argentina, no encontraban otra salida. ¡Cuántos años viendo cómo se despreciaba nuestra moneda nacional, a la que recordábamos siempre, a pesar de los nombres que le cambiaban con cada devaluación! Menem asumió el poder en julio de 1989 cuando dejó la presidencia Alfonsín ya con una inflación galopante. El 1º de enero de 1992 "el peso" quitó cuatro ceros a la moneda nacional y con el compromiso de mantener la estabilidad sin fabricar más dinero sin respaldo. Esa "convertibilidad" lograda por Cavallo con el aval del presidente Menem fue "iluminando" a los argentinos y asombrando al mundo. El doctor Cavallo no había tenido participación en la inflación de casi 50 años y la eliminó con un "parate en seco" ¡Qué inteligencia! ¡Qué valor! Merece respeto y admiración por haber logrado lo que nadie pudo hacer.
Haidé Z. de Garello


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