El seleccionado uruguayo debutó con un triunfo en la Copa América al vencer a Bolivia por 1-0 en el primer partido jugado en la sede de Medellín, cuyos habitantes no olvidaron la ausencia de la renunciante Argentina con leyendas hostiles. La victoria del equipo de Víctor Púa fue posible gracias al gol convertido, a los 18 minutos del segundo tiempo, por el delantero Javier Chevantón, de Danubio.
Los uruguayos, que asistieron con un equipo de emergencia, son los grandes favoritos para adjudicarse el grupo C pero dejaron una pálida imagen en el primer partido, que tuvo un trámite aburrido.
El triunfo fue un premio tal vez inmerecido para los uruguayos, que tuvieron 20 minutos iniciales muy buenos pero luego debieron empeñarse a fondo para contener a Bolivia.
Atacando menos, los bolivianos tuvieron dos claras jugadas de gol, en ambos casos a través de Milton Coimbra.
El ariete motivó una gran atajada de Munúa con un cabezazo a quemarropa, en una jugada en la que el árbitro canadiense Mauricio Navarro no cobró lo que pareció un penal a favor de Bolivia por falta de Carlos Díaz contra el movedizo Limberg Gutiérrez.
Y cuando se jugaba tiempo de descuento en el primer período, Coimbra no alcanzó a pegarle al balón desde 15 metros, dejando escapar otra gran ocasión.
Bolivia estuvo nuevamente cerca de anotar al comienzo del segundo tiempo, cuando Gutiérrez no le pudo dar a una pelota tras un centro de Ronald Ribeiro.
Las opciones dilapidadas por Bolivia le costaron caro. Así fue como Chevantón, en el momento menos esperado, puso en ventaja a Uruguay.
El equipo oriental terminó pidiendo la hora ante los ataques desesperados de Bolivia en los minutos finales.
Por su parte, el público de Medellín no ocultó su decepción por la renuncia a participar por parte del seleccionado argentino, cuya ausencia le restó gran parte de jerarquía a la competición.
Numerosas banderas con términos como "arrogantes" y "cagones" manifestaron el descontento de los 30 mil espectadores presentes en el estadio Girardot.
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La Ciudad
