Un fuerte sismo sacudió nuevamente ayer el sur de Perú, causando tres heridos, daños en algunas viviendas y pánico entre la población, que aún no se recupera del violento terremoto que estremeció esa región hace dos semanas.
La policía no informó de víctimas fatales, pero dijo que al menos siete personas fueron trasladadas a un hospital de la cuidad de Arequipa, 1.000 kilómetros al sur de Lima. Tres de ellas presentaban contusiones leves y otras cuatro fueron atendidas por ataque de nervios.
Según un reporte preliminar del Instituto Geofísico de Perú, el sismo registró una magnitud de 5,5 grados en la escala de Richter, y su epicentro fue ubicado a 100 kilómetros al suroeste de la localidad de Ocoña, en el departamento de Arequipa.
Sin embargo, el Instituto Geofísico de Estados Unidos dijo que el sismo alcanzó una magnitud de 7,2 grados en la escala abierta de Richter.
El temblor remeció ayer una región del sudeste que ya había sido devastada por un terremoto que dejó 75 muertos y 2.689 heridos, mientras aviones de Estados Unidos, Colombia y Perú llevan ayuda para 217.495 damnificados.
Según el Instituto Geofísico del Perú, el epicentro del temblor ocurrido a las 4.38 (6.38 de Argentina) fue localizado en el océano Pacífico, frente a la localidad costera de Ocoña, situada a 650 kilómetros al sudeste de Lima. Fue sentido en las ciudades de Arequipa, Cusco, Puno, Moquegua y Tacna, cerca de la frontera con Chile, donde causó pánico entre los pobladores.
Se desplomaron paredes
En Arequipa, 765 kilómetros al sudeste, cayeron algunas paredes y que al menos una casa se desplomó después de que salieron sus ocupantes. Arequipa, capital del departamento homólogo se encuentra en una ladera del volcán Misti. Es la segunda ciudad en importancia del país después de Lima.
Miles de arequipeños pasaron la noche en las calles y plazas por el miedo a volver a sus casas, ya que temen que un nuevo remezón haga desplomar sobre ellos sus viviendas o los edificios cercanos.
Fue sentido en Ocoña, Caravelí, Camaná y Chala. Hubo pánico entre los moradores atemorizados pos sismos anteriores.
El segundo temblor de anteayer, que tuvo una magnitud preliminar de 3,8 grados, ocurrido por la mañana, volvió a sacudir el sudeste. El epicentro fue localizado en la cordillera de los Andes, cerca de Cusco, la antigua capital del imperio de los incas, a 580 kilómetros de Lima.
El Instituto Nacional de Defensa Civil dijo que el terremoto y los sismos posteriores dejaron hasta ahora 75 muertos, 64 desaparecidos, 2.689 heridos y 217.495 damnificados; 17.584 casas fueron destruidas y 35.601 quedaron resquebradas.
El gobierno dijo ayer que en vista de que la carretera Panamericana, en la costa del Pacífico, se agrietó a raíz del terremoto o fue cubierta por deslizamientos de arena o desprendimientos de rocas en diferentes tramos, se construirá una nueva vía con otro trazo.
Mientras, el Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas informó que aviones de Estados Unidos, Colombia y Perú llevan ayuda nacional e internacional, para los sobrevivientes, de Lima a los lugares afectados por el terremoto.