Productos primarios y manufacturas industriales, del lado argentino. Electrodomésticos, vehículos, autopartes e informática, del lado asiático. Esta es la característica que presenta hoy la balanza comercial entre la Argentina y los países de la región Asia Pacífico, especialmente Corea, Taiwán y Singapur, naciones de elevado poder adquisitivo, poco conocidas por las pymes nacionales.
Los tigres asiáticos "cuentan con un potencial de demanda y una articulación con sistemas logísticos de abastecimiento eficientes que favorecen la operatoria pyme en un marco de integración de oferta y fomento de la asociatividad para competir", explicó Sergio Cesarín, miembro de la Fundación Okita y especialista en relaciones comerciales con Taiwán.
El especialista participó junto a José Teng-Ching Lin, director económico de la Oficina Comercial y Cultural de Taipei; Ernesto Fernández Taboada, director ejecutivo de la Cámara de Comercio Argentina para el Sudeste Asiático; y Gonzalo Paz, del Consejo Argentino para las Relaciones Internacionales, de un panel que se realizó en la sede de la Universidad Nacional de Rosario. El encuentro organizado por el vicerrectorado de la UNR apuntó a difundir aspectos comerciales y culturales de los países del Asia Pacífico, y estuvo orientado a empresarios, comerciantes, productores y estudiantes.
En busca de nuevos nichos
En la actualidad, la balanza comercial argentina con Corea, Taiwán y Singapur es significativamente positiva para los países asiáticos. Sin embargo, y pese a sus niveles de crecimiento, quedan una serie de nichos, especialmente del rubro alimentario, que pueden ser explotados por las empresas argentinas.
Los especialistas coincidieron en que no sólo se trata de hacer negocios y destacaron la importancia que esos pueblos le asignan a las costumbres y los hábitos culturales como una herramienta indispensable a tener en cuenta a la hora de encarar una relación comercial.
El comercio exterior de Argentina con Corea alcanzó en 1999 los 382,5 millones de dólares, de los cuales 181,2 millones fueron exportaciones hacia ese destino y 563,8 importaciones. Los productos electrónicos, los vehículos y motonetas lideran desde 1996 el ránking de productos coreanos que ingresan a la Argentina. Mientras, desde aquí se exportan esencialmente cereales, pescados y crustáceos, alimentos derivados y manufacturas de hierro aunque en proporciones sensiblemente inferiores.
Singapur es una república con 3,1 millones de habitantes que aplica una política de libre comercio, lo que se traduce en una estrecha banda arancelaria que no supera el 5%. Las importaciones argentinas desde ese país sumaron entre enero de 2000 y enero de 2001 87, 3 millones de dólares FOB. Se destacan plantas vivas, productos de floricultura, aceites esenciales, preparaciones de perfumería, sal, azufre y combustibles minerales, entre otras.
En tanto, las exportaciones argentinas hacia ese país alcanzaron en el mismo período 33,8 millones de dólares FOB concentradas en animales vivos, carne, pescado, frutas, cereales, aceites animales, bebidas alcohólicas y productos de industrias químicas como manufacturas de cuero, cartón, madera y papel, entre otros.
"Entre los productos que tienen posibilidades de inserción en el mercado de Singapur se encuentran los vinos y la miel de la Argentina", explicó Fernández Taboada. También mencionó las pasas de uva, el aceite de limón, los aceites vegetales, los cueros bovinos, la fruta fresca y los jugos de fruta que son muy requeridos en ese país. Además, el papel para decorar, las baldosas cerámicas, las máquinas envasadoras y los equipos de neonatología.
Taiwán es el tercer mayor productor mundial de equipos y tecnología informática, luego de Estados Unidos y Japón, y ocupa el primer lugar en producción de computadoras notebook, monitores, placas madres y scanners.
José Teng-Ching Lin explicó que los principales productos de importación de ese país pasan por los bienes de consumo, productos agrícolas y materias primas, maquinarias y bienes de capital.
Por estas características se posiciona como un futuro buen cliente para las pymes de la región que son productoras de este tipo de bienes.
Por otra parte, la economía taiwanesa está atravesada por una profunda cultura pyme. En rigor, el 98% de las industrias taiwanesas son pymis que en su conjunto generan el 65% de las exportaciones y absorben el 75% de la mano de obra del país.
La Ciudad
