Temen suicidio de la texana que mató a sus hijos

Andrea Yates, la mujer del estado norteamericano de Texas que sufriría de depresión posparto y confesó haber ahogado en una bañera a sus cinco hijos está en "profundo estado psicótico" y bajo vigilancia día y noche para evitar que intente suicidarse, según indicó su abogado, George Parnham.
El defensor de Yates hizo el comentario tras visitar a su cliente de 36 años el fin de semana en la cárcel del condado de Harris, donde permanece detenida desde que ocurrieron los asesinatos el miércoles pasado.
"Está en un muy profundo estado psicótico. Profesionales en salud mental la están atendiendo muy bien, y obviamente le han administrado fuertes dosis de medicamentos. Además la están vigilando las 24 horas del día para que no intente suicidarse", detalló Parnham .
El abogado admitió que no pudo aún entablar una conversación racional con su cliente: "Yo preveo que eventualmente los medicamentos que ella está tomando van a empezar a hacerle efecto y existirá cierta posibilidad de establecer una conversación racional con ella. Ese momento no ha llegado".
Yates ha estado bajo atención psiquiátrica por algún tiempo, dijo su abogado, quien agregó que está estudiando muy de cerca su expediente médico antes de decidir si procede con una defensa aduciendo locura.
En tanto, los fiscales no decidieron si pedir la pena de muerte para Yates, pero algunos expertos legales dicen que podrían enfrentar algunas dificultades si su esposo se opone, como lo ha hecho hasta ahora. Russell Yates, ingeniero de computadores de la Nasa, ha dicho reiteradamente que su esposa sufría de una severa depresión posparto y que había tomado fármacos antidepresivos y antipsicóticos en los últimos años.
Andrea Yates confesó que ahogó a los niños, uno por uno, y que a su hijo mayor lo persiguió por la casa antes de lograr sumergirlo en el agua para matarlo. El funeral conjunto de los cinco chicos está previsto para mañana en una iglesia del área de Houston.
Parnham indicó que es importante tener en cuenta que tragedias de esta magnitud no ocurren de un momento a otro. "Hay una enfermedad progresiva que creo se demuestra por acontecimientos en el pasado que llevaron a esta tragedia", agregó.