La Caja de Jubilaciones y Pensiones de la provincia rechazó un 50% de las presentaciones de agentes públicos que pretendieron jubilarse por incapacidad. Luego de revisiones médicas promovidas por la intervención del organismo, más del 40% de los jubilados cuyo trámite fue revisado deberán reintegrarse a sus puestos de trabajo.
La Caja de Jubilaciones es el principal causante del déficit de la Tesorería provincial, con un rojo de 100 millones de pesos anuales que se contiene sólo gracias a la existencia de una ley de emergencia provincial.
Revisaciones de juntas médicas a jubilados por invalidez permitieron determinaron, en algunos casos hasta porcentajes de incapacidad cero, y en otros valores que van de un 10 al 30%. Estas cifras están muy por debajo del 66% mínimo que establece la ley. La legislación prevé que una jubilación de este tipo es definitiva sólo cuando el beneficiario cumple 50 años y 10 de beneficio. Hasta que eso ocurra, es transitoria y la norma exige reconocimientos periódicos cada dos años.
Casos increíbles
Los casos de los que se jubilan por incapacidad en la Caja provincial continúan provocando asombro en la opinión pública a partir de la intensificación de los controles y la aparición de algunos "aspirantes a vivos" -tal como fueron calificados por el interventor de la Caja, Fernando Bondesío- que siguen dilapidando los fondos que tanto cuesta aportar a quienes se desempeñan en la función pública pese a arrastrar enfermedades agudas o crónicas sin el ánimo de sacarle provecho.\Así se pudo conocer, por ejemplo, el caso de Hugo Milani, de Santa Fe, quien maneja un taxi pese a haber sido jubilado en 1995 con el 67% de invalidez, a los 47 años. En ese momento, la resolución de la Caja decía que debía realizarse revisaciones una vez al año, algo que jamás sucedió hasta se lo encontró a través de una denuncia anónima, tras haber sido citado y buscado sin suerte durante mucho tiempo. Al efectuársele el control se le encontró sólo un 20% de invalidez y deberá abandonar el taxi para reintegrarse.\Otro caso increíble es el del jubilado por incapacidad rosarino que aparentemente padecía una lumbalgia que no le permitía agacharse ni siquiera vestirse sin ayuda. Sin embargo, en la última revisación y cuando se estaba vistiendo y aparentemente creyó que nadie lo estaba observando, se agachó y se puso las zapatillas más rápido que un atleta.\También se conoció otro caso ocurrido en Rosario donde un agente público fue jubilado con un 90% de incapacidad por padecer de vértigo. Pero al concurrir a un control se le detectó solamente un porcentaje mínimo de invalidez, por lo cual fue reintegrado.\Bondesío afirmó que a partir del seguimiento y de los controles que está haciendo la Caja hay mucha gente que está volviendo a trabajar. Dijo que hay una gran cantidad de denuncias -a un 0 800 y por carta al interventor- que indican y señalan a las personas que están jubiladas y sin embargo trabajan normalmente.\También destacó que a partir de las medidas de reordenamiento y de cumplimiento, muchos jubilados por incapacidad toman conciencia y solicitan ser evaluados nuevamente, ya que consideran que su dolencia "ha mejorado notoriamente" o se han curado y desean volver a trabajar.
La Ciudad
