Las Vegas es un destino que encendió mis emociones así como la de todos quienes la visitan. Se trata de una ciudad donde las luces del juego estallan tanto que siempre parece de día, y donde hay multitudes que llegan y multitudes que se van. Donde falsos Elvis Presley le gritan a propios y extraños que en estas calles lo excitante no tiene ningún horario.
Las Vegas es una de las ciudades más visitadas del mundo y también el destino preferido de los turistas estadounidenses. Allí todos apuestan; muchos en las mesas de juego de los casinos y otros al matrimonio.
No existe ningún otro lugar en el planeta donde sea tan fácil casarse (y descasarse). Las bodas "a la carta" son un comercio tan organizado -capilla y testigos incluidos- que los novios sólo tienen que dar el sí. El romanticismo al estilo Hollywood atrapó a famosas parejas como Frank Sinatra y Mia Farrow, Bruce Willis y Demi Moore.
Es que la ciudad del estado de Nevada no descarta nada a la hora de atraer nuevos huéspedes: promociones especiales, muy buenos hoteles a tarifas accesibles y nuevos complejos de espectáculos y diversión. La meta de la ciudad es mucho más que atraer a los viajeros con el azar de las cartas, los dados y la ruleta. Su oferta, ahora es convertirse en la Capital Mundial del Entretenimiento, dejando atrás su fama de ciudad de pecadores.
Faraónicos hoteles y muchas originalidades tientan a cada paso, haciendo que la estadía en el "reino del juego" sea una verdadera apuesta a la diversión y a la sorpresa constante.
Eugenio Calabresi
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La Ciudad
