La CGT disidente de Hugo Moyano convocó para el 20 de junio a una "jornada nacional por el boicot a las empresas españolas para salvar a Aerolíneas" y afirmó que una eventual convocatoria de acreedores sería "una trampa y no una solución" para la compañía. La central sindical llamó a demostrar el 20 de junio, Día de la Bandera, que "no hay resignación sino dignidad nacional" y que está llegando "la hora de los pueblos". Agregó que "en cada plaza, en cada ciudad" se convocará al pueblo a "sumarse al boicot y salvar a Aerolíneas por nuestra dignidad, por nuestro trabajo, por nuestra bandera y por la Patria".
Respecto de una convocatoria de acreedores por parte de Aerolíneas, Moyano afirmó que "no es el camino que trabajadores y acreedores se peleen por los despojos de la empresa". Además, afirmó que "España debe hacerse cargo del vaciamiento y devolver la plata robada" porque "Aerolíneas debe volver a ser Argentina". Añadió que "una vez lograda la reparación, Aerolíneas debe ser nacionalizada para garantizar su funcionamiento".
El dirigente invitó a la ciudadanía a continuar con el boicot que busca "afectar a las empresas de capitales españoles como Repsol, Telefónica, Unifón y los bancos Río, Francés, Santander, las AFJP Consolidar y Orígenes", con el fin de "recomponer el patrimonio saqueado".
"Teníamos razón"
El titular del gremio de los técnicos, Ricardo Cirielli, opinó que la convocatoria de acreedores por parte de la Sepi "pone en evidencia que teníamos razón cuando decíamos que no había un plan de viabilidad para la empresa y, si no hubiera sido por la resistencia de los trabajadores, hoy Aerolíneas no existiría".
En ese sentido, remarcó además que "lo que también hay que decir es que era mentira que había estabilidad laboral, cuando no hay estabilidad empresaria, y por eso llaman a convocatoria acreedores".
Consultado sobre si lo que se viene es la quiebra para la ex línea de bandera, contestó: "Para nada. Acá hay un compromiso fuerte del gobierno argentino para que la empresa siga", en lo que pareció un leve cambio de postura.
Sobre los pasos futuros de su sector gremial en el conflicto que lleva ya más de dos meses en Aerolíneas Argentinas, Cirielli informó que desde su sector "se van a esperar los pasos legales y que el juez que interviene empiece a actuar en consecuencia".
Al volver sobre las últimas novedades desde los empresarios de Aerolíneas, comentó que "lo que se ve en concreto es que la empresa está mal económicamente y queda en evidencia que no es un conflicto laboral, sino un problema político, económico y judicial".
La Ciudad
