El plan. Los indicadores fabriles generaron la necesidad de nuevas estrategias

El Central lanzó un plan para la refinanciación de pasivos

El Banco Central (BCRA) informó ayer el lanzamiento de un plan de refinanciación de deudas bancarias que tiene como objetivo rehabilitar a empresas que por su calificación de riesgo están impedidas de acceder a asistencia financiera en el circuito normal.
La medida se inscribe dentro de una serie que tiende a facilitar la refinanciación y el acceso al crédito de las firmas que se hayan acogido a los planes de competitividad.
La esencia del plan se traduce en una flexibilización de las normas de clasificación de morosos, permitiendo a los bancos en forma voluntaria otorgarle a sus clientes mejores notas en base al cumplimiento de una serie de requisitos.
En primer término se establece un régimen de refinanciación de deudores comerciales en situaciones 3,4 y 5 (las peores) con un plazo máximo de 10 años.
El deudor podrá ser reclasificado de acuerdo con el porcentaje de amortización de la deuda refinanciada o la cantidad de meses desde que refinanció.
Para pasar de 5 a 4 una empresa deberá amortizar el 10 por ciento de la deuda; si está en 4, para pasar a 3, otro 10; y si está en 3, para pasar a 2, un 5 por ciento. Se fija además, otro 10 por ciento para pasar de 2 a 1.
Los porcentajes resultan acumulativos, de modo que una empresa que está en cinco, para pasar a uno debe refinanciar el 35 por ciento de sus obligaciones en mora; si está en cuatro, 25; y si está en tres, el 15 por ciento.
En cambio, si la empresa no opta por amortizar parte de la deuda podrá entrar en un plan que le permite acceder a un escalón superior, en base a la cantidad de meses de cumplimento.
Esto es: para pasar de 5 a 4, seis meses; de 4 a 3; tres meses; de 3 a 2, otros tres meses, y de 2 a 1, seis meses.
Al igual que en el caso anterior, los períodos son acumulativos, de manera que para saltar desde 5 a 1 deberán pasar 18 meses; desde 4, doce; y desde 3, nueve meses.
El plan del BCRA establece un esquema de recupero gradual de las previsiones que tiene que efectuar el banco en función de la situación del deudor, el que se verificará con la aplicación de un cronograma mensual de 25 meses.