"Tenía el revólver arriba del mostrador. Pero los vi tan chicos que no me atreví a tirarles. Podría haberlos matado, pero no quise. Me dio lástima. Se ve que a ellos no". La afirmación es de José Greco, un agenciero de loterías de la zona sur, que se enfrentó con dos delincuentes que intentaron asaltarlo y sufrió una herida de bala en el abdomen.
Greco, de 67 años, salvó milagrosamente la vida, ya que el proyectil le atravesó el cuerpo con orificio de entrada a la altura del glúteo derecho y de salida debajo de las costillas. Los agresores hasta ayer no habían sido detenidos por la policía, que suministró una versión del hecho diferente, ya que sostuvo que el hombre utilizó su arma de fuego y resultó herido en un tiroteo.
El hecho ocurrió el lunes minutos antes de las 20 en el local de quinielas Rey Mago, ubicado en Necochea 2809, en jurisdicción de la seccional 16ª.
José Greco, padre del dueño del negocio, estaba a cargo del local cuando dos jóvenes de unos 17 años entraron armados y le pidieron el dinero.
El hombre cuenta que estaba sentado en un sillón y se levantó. En ese momento el disparo impactó en su pierna y lo volteó. Al verlo caer, los ladrones se fueron corriendo y sin llevarse nada.
Otro antecedente violento
"Son tan chicos que no saben lo que hacen. Si no hubieran disparado, con una conversación se hubieran llevado unos pesos", dijo Greco ayer a la tarde, en el Hospital de Emergencias donde permanecerá internado un día más en observación.
El tiroteo no es el primer susto que se lleva la familia. El 23 de enero de 1999 sufrieron un ataque semejante. Ese día, un proyectil impactó en una de las columnas del local y la esposa del hombre, de 69 años, sufrió una lesión en el pie.
Greco sostiene que no quisiera seguir trabajando, aunque reconoce que debe evaluar la decisión ya que el negocio representa el único ingreso que tiene.
El hombre dijo que el revolver de su propiedad, calibre 38, es el segundo que le "saca" la policía. El anterior fue incautado en el episodio en el que resultó herida su esposa. "Me lo sacan a mí, que obro de buena fe, y los delincuentes andan con una 9 milímetros que es peor", indicó el hombre.
Voceros de la Unidad Regional II relataron que el agenciero intentó resistirse al robo esgrimiendo su arma. Y que fue entonces que se produjo el tiroteo prácticamente dentro del local. Los ladrones salieron espantados, pero Greco recibió el impacto en su pierna derecha.
Los médicos indicaron que el hombre se encuentra fuera de peligro, aunque aún resta esperar la evolución de la herida y evaluar las secuelas.
El hijo del hombre herido, Marcelo, dijo por su parte que "por suerte la bala no alcanzó ningún órgano vital. Sólo hubo un roce con el hueso sacro que puede causar algún problema".
"Hacía 6 ó 7 meses que los asaltos se habían calmado. Para nosotros no eran personas del barrio. Además creo que los vieron huir en un auto, que dicen sería un Renault 12 rojo", señaló Marcelo Greco.