Roa Bastos elogia a Chilavert

El reconocido escritor paraguayo Augusto Roa Bastos definió a su compatriota José Luis Chilavert como "un buen ejemplo porque es inteligente, humilde y sabe ubicarse".
"Tiene un carácter fuerte y ese carácter se proyecta como parte de su personalidad. No es un improvisado y le ha tocado actuar en medios muy duros para los cabecitas negras -y nosotros nos incluimos en esa definición- como son Argentina y Francia", afirmó el ganador del Premio Cervantes 1989.
Según Roa Bastos, "esa suerte de agresividad de Chilavert en Argentina es una especie de defensa para él, no sólo porque a veces se sintió discriminado, sino porque la rivalidad era muy fuerte y el que dispone de una fuerza tanto intelectual como deportiva trata de no ser superado".
Invitado a una comparación entre Diego Maradona y Pelé, el escritor respondió que "yo elegiría a Pelé. En primer lugar porque creo que es mejor futbolista que Maradona, y en segundo lugar por su humildad como estrella".
"No lo he visto nunca a Pelé figurar en grandes audiciones del estrellato, se ha dedicado al deporte con ese sentido casi religioso que tiene la gente que desciende de razas africanas en Brasil, y eso le da también a ellos un sentido muy distinto de su afición al deporte", expresó.
Roa Bastos, quien en su juventud fue jugador de las divisiones inferiores de Cerro Porteño, manifestó sobre Maradona que "como estrella deportiva creo que en sí es tema de interés para una novela, pero como Maradona hay muchos, en las provincias argentinas, en mi país mismo hay verdaderos genios del fútbol que van a ser siempre desconocidos y que desde muy temprana edad tienen una visión yo diría genial".
También apuntó el autor, en entrevista concedida a la revista Al Arco, que "el mayor mal para el fútbol es que se le han mezclado los intereses económico-financieros y que ahora además de ser un deporte excelente es un excelente negocio".
"No en balde las directivas de los clubes se manejan con respecto a estos intereses como verdaderas hampas políticas o policiales. Si esos grandes intereses en juego van creciendo de una manera no normal pueden incluso hacer que el fútbol se extinga o cambie",, afirmó.
En cuanto a intelectuales como Jorge Luis Borges y Umberto Eco que han calificado al fútbol como "el nuevo opio de los pueblos", Roa Bastos recordó que "antes se decía que el libro era el opio de los pueblos. En este caso no sé quién tiene más razón, si ellos o cualquiera de los que vemos el fútbol con más naturalidad".
"El menosprecio al fútbol es un capricho de los intelectuales llamados puros, pero la excesiva intelectualidad o el excesivo alambicamiento de los conceptos a veces enturbia en lugar de esclarecer las cosas más simples", concluyó.

El arquero paraguayo es "un ejemplo" para el novelista.