Rodolfo Montes
"Desde chico escuché por radio la cotización del sorgo. Argentina es un gran productor de sorgo, que es forraje. Con este disco estoy diciendo que este rancho que hemos construido entre todos está lleno de vinchucas", disparó Luis Alberto Spinetta y todo el Hard Rock Café lo festejó. "Este es un álbum un poco telúrico", dijo para completar la descripción.
El máximo poeta del rock argentino y uno de los principales fundadores de ese movimiento presentó su nuevo trabajo discográfico, "Silver sorgo", en el Hard Rock Café de Buenos Aires. Spinetta tocó 5 temas durante una sesión de treinta minutos, y fue muy festejado por viejos y nuevos amigos, entre los que se encontraban Dolores Barreiro y su marido Matías Camisani.
"Mi única obligación es hacer cada día mejores canciones y tirar para adelante, antes de que cierren el quiosco...", dijo como para romper el hielo en la comunicación con la prensa, tal vez en respuesta a cierta demanda insatisfecha de los medios de poder contar con entrevistas que el músico no viene dando desde hace mucho tiempo.
De los doce temas de "Silver sorgo" Spinetta interpretó cuatro: "Esta es la sombra", "El mar es de llanto", "Mundo disperso" y "El enemigo". El jugoso set concluyó con una muy festejada versión de "Me gusta ese tajo". Inmediatamente presentó a sus músicos: Daniel García Reynoso, Claudio Cardone, Javier Malosetti y Daniel Wirzt.
Luego se refirió al cambio de formación en su banda, desde Los Socios del Desierto a esta nueva. "Me gusta cambiar por cambiar nomás, como dice Fito (Páez). Es bueno ir trabajando con músicos distintos en diferentes etapas, sino el camino es demasiado recto y se hace aburrido".
Después de las canciones, el músico dejó la guitarra a un costado y la banda se fue de escena. Se sentó ante una pequeña mesa con una cobertura de terciopelo rojo, con dos pares de anteojos superpuestos. Estaba incómodo pero hizo un esfuerzo por ser amable.
"La música es un aspecto decorativo de la existencia, por más que la música sea excelsa", le aclaró a un colega que sugirió que su música podía ser revolucionaria. Con relación a "El enemigo", el tema que lo atrapa, Luis Alberto dijo que "es necesario que aparezca la verdad de cada uno de nosotros, no la verdad de los políticos. El enemigo es el que no le da hospitales ni colegios a la gente".
En las contadas oportunidades en que el ex Pescado Rabioso se sienta a charlar con periodistas nunca falta la pregunta sobre un imaginario regreso de Almendra. El Flaco, de buen humor, replicó: "Les pido que soñemos con cosas más tangibles, preguntémonos por qué no llueven pollos al espiedo sobre las poblaciones hambrientas ( estallido de risa en la sala)... Almendra es el espíritu de las cosas y no hay que moverlo de donde está".
En cuanto al disco, Spinetta lo definió como la continuidad de "Los ojos", el álbum anterior. "Es un trabajo impecable que intenta alertar sobre la facilada que circula peligrosamente en nuestro país últimamente. Este disco está un poco más cerca de la gente y tiene algunos colores y rasgos argentinos", recalcó.
El ex Invisible tuvo su momento emotivo familiar cuando habló de su nieto de 6 meses, hijo de Catalina Spinetta y el actor Gastón Mutti, que "está lleno de energía", dijo; y de su padre, Luis Santiago, presente en el lugar, y para quien pidió un fuerte aplauso.
Sobre la situación que se vive en el país la reflexión de Spinetta fue terminante. "¿Qué hemos hecho con el país? -se preguntó-. Primero pusimos a unos tipos horribles que mataron a todo el mundo, después votamos como unos boludos y ahora tenemos a la gente peleándose por una olla de guiso". Después completó: "No es el tema que yo toque más o menos, eso no tiene ninguna importancia. Si me decís que tocando todos los días el país se llena de escuelas, de hospitales y de comida para los hambrientos, entonces yo toco todos los días".
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La Ciudad
