Londres. - La ex primera ministra de Gran Bretaña, Margaret Thatcher, irrumpió ayer en la campaña electoral de su país advirtiendo a los votantes de que podrían encontrarse gobernados por una "dictadura arrogante" si el primer ministro laborista, Tony Blair, obtiene una abrumadora victoria en las elecciones generales del 7 de junio. La ex mandataria, fue aún más dura y aseguró que en su opinión que Blair "está comprometido con políticas que llevarán a la progresiva extinción de Gran Bretaña como nación independiente". Después de instigar la semana pasada el debate sobre el euro y advertir sobre el peligro de perder la libra esterlina, Thatcher optó esta vez por lanzar un furibundo ataque contra los gobiernos que tienen una abrumadora mayoría en el Parlamento. "En principio no tengo nada en contra de las grandes mayorías en los Comunes: de hecho, lo disfruto. Pero, en mi tiempo, y en el de mi sucesor, John Major (1990-97), el primer ministro siempre rendía cuentas", subrayó la ex jefa de gobierno entre 1979 y 1990. Agregó que "dos veces a la semana había preguntas rigurosas en la Cámara de los Comunes que eran tratadas -y se esperaba que así fuera- con respeto".
Blair cambió las dos sesiones de preguntas al primer ministro en el Parlamento, que eran dos veces a la semana y de quince minutos cada una, por una semanal de media hora.
Grietas en los conservadores
Cada voto cuenta
Cada voto cuenta
Las señales indirectas que dio Thatcher, de que Blair se encamina a un nuevo período de cinco años de gobierno, fue otra de varias grietas que han estremecido el Partido Conservador mientras se acercan los comicios, al tiempo que se cuestiona el futuro del líder del partido de Thatcher, William Hague. Se dice que los veteranos del partido, Kenneth Clarke y Chris Patten, están descontentos con Hague, quien durante el debate electoral se ha dedicado a combatir a la moneda única de Europa por encima de cualquier otro tema. La ex dirigente conservadora lanzó un duro ataque contra Blair mientras las encuestas de opinión auguran una derrota para el Partido Conservador el 7 de junio mayor que en 1997, cuando el líder laborista llegó al poder con el mejor resultado en 150 años. "Aplaudo un gobierno fuerte, pero no un gobierno soberbio sostenido por compinches, cifras y un culto a la personalidad", escribió Thatcher en el diario conservador Daily Telegraph.\Thatcher, apodada la "Dama de Hierro" durante los años de la Guerra Fría en la década de los 80 cuando ella misma contaba con mayorías parlamentarias, acusó a Blair de erosionar el poder británico en la Unión Europea permitiendo la desaparición de algunos vetos negociados y de prepararse para abolir la libra a favor del euro. "En un momento en el que el futuro de nuestro país como nación independiente se encuentra en la balanza, (una amplia victoria de Blair) supone todo un riesgo", dijo. Sobre Europa, dijo que la libra esterlina es una moneda fuerte y que si el país decide ingresar en el euro puede perder el poder para decidir su propia política económica.\