En sólo dos meses protagonizó un raíd delictivo por comercios de la ciudad. A todos los atracos les imprimió su huella personal: concurrió siempre armado con una imponente ametralladora que llevaba escondida dentro de una mochila azul. Le adjudicaron siete robos cometidos con la misma modalidad, aunque en tres de ellos no alcanzaron las pruebas para acreditar su participación en los mismos. Pero en los restantes, para la Justicia, fue culpable y deberá pagar ocho años en prisión por la secuencia de atracos.
Alberto Daniel Rostro tiene 24 años y en cada proceso que acumula en Tribunales aparece mencionado junto a una rara metralleta negra y una mochila azul. Así lo vieron cada una de las víctimas que sufrieron una serie de robos cometidos entre abril y mayo de 2000. Todos los hechos fueron cometidos de idéntica forma: el ladrón aparecía a pie en algún negocio y, sin manifestar alteración o nerviosismo, sacaba de su inseparable mochila azul una metralleta marca Brenta modelo Fire, calibre 22 largo.
Golpe a golpe
Ahora el juez de Sentencia Nº 2, Antonio Ramos, condenó a Rostro a ocho años de prisión por cometer cinco hechos de robo calificado, si bien uno de ellos quedó en un mero intento. Sin embargo, Rostro apeló la decisión del juez y ahora la Cámara Penal revisará el caso para dar un dictamen definitivo.\El primer robo ocurrió el 7 de abril del año pasado en el súper Nahuel, de Córdoba 4001. El ladrón tuvo el gesto de pedir permiso para ingresar con la mochila, pero una vez dentro del local sorprendió a cajeros y clientes cuando sacó una ametralladora de su bolso. Se apoderó de unos 400 pesos y se fue.\El siguiente atraco fue en el local Farmashop, de Córdoba 2999, el 6 de mayo siguiente a las 18.45. El falso cliente pidió remedios y leche sin lactosa. El empleado fue a buscar la mercadería al depósito y, cuando volvió, quedó perplejo al ver que el joven lo apuntaba con un arma de caño largo. Se apropió de unos 350 pesos y huyó corriendo. Seis días después irrumpió en un negocio de venta de ropa de Santa Fe 2868, de donde se llevó unos 250 pesos de la recaudación, una billetera y algunas prendas.\Un nuevo golpe fue efectuado en el súper Manolo, de Génova 1465. Esta vez, el ladrón de la ametralladora fue acompañado por un cómplice que llevaba un revólver. Juntos amenazaron a una cajera y desaparecieron tras cargar 2.600 pesos en la mochila y despojar al dueño del local de una pulsera de oro y un reloj.\El último robo, si bien no llegó a consumarse, es el que derivó en la detención de Rostro. El asaltante ingresó a las 7 de la tarde del 19 de mayo en la joyería El arte, de Mendoza 5283, sacó su arma y exigió joyas y dinero. Pero el comerciante comenzó a gritar que ya había llamado a la policía y esto asustó al ladrón. Sin embargo, una semana después el vendedor reconoció a Rostro en la calle y llamó a la policía. Así lo apresaron.\En su casa secuestraron el arma y la mochila y recuperaron las alhajas y prendas robadas en los otros hechos. Luego las víctimas lo reconocieron en una rueda judicial. También le adjudicaban otros tres hechos similares ocurridos en el mismo período, pero responsabilidad no llegó a probarse. 12-19-5: joyería El Arte 30 de mayo: super Manolo, de calle Génova
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