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Así como estamos vamos muy mal

Como ciudadano argentino, estricto cumplidor de todos los deberes cívicos, así como aportante regular al régimen previsional por más de 30 años, desocupado desde hace más de 9, por el cambio de ley, veterano de más de 60, creo que me asiste el derecho a una crítica, y además una propuesta. Quiero dirigirme a los señores de los gobiernos y legisladores en general, que pasan por el poder sin pena ni gloria, y decirles: cada día estamos más endeudados y se agravan las condiciones de vida, careciendo de lo más elemental en salud, educación y sin trabajo. Como digno laburante, que otrora gozara de obligaciones y derechos propios de mi clase, que me permitían vivir con altura, desde hace ya varios años me siento defraudado por todos los poderes que hacen a la vida de mi país, gobernantes, funcionarios, legisladores y sindicalistas, salvo algunas excepciones, por suerte. Creo que es hora de dejar de hacerse los distraídos y bajar el gasto público, bajar la carga impositiva, lo cual nos permitirá elaborar y manufacturar a menores precios y por lo tanto ponernos al alcance de mercados internacionales para la compra de productos argentinos; dar medidas concretas y fundamentalmente administrar bien nuestro querido país. En una palabra hay que cambiar de democracia, así como está no vamos a ningún lado.
Raúl Cavallieri