El actual campeón de América y del mundo, Boca Juniors, con la ventaja adicional de haber ganado el primer encuentro como visitante y con el plus de que su adversario jugará sin su principal estrella, Romario, buscará el pase a las semifinales cuando esta noche enfrente al Vasco Da Gama, en el cotejo revancha por los cuartos de final de la Libertadores.
El decisivo encuentro se jugará a las 21.40 en la Bombonera, será dirigido por el árbitro peruano Gilberto Hidalgo e irá televisado en directo para el interior del país por PSN.
Boca logró un gran triunfo hace una semana en el estadio Sao Januario de Río de Janeiro por 1 a 0, con gol de Guillermo Barros Schelotto tras un centro desde la derecha de Juan Román Riquelme. Con ese triunfo, el equipo de Carlos Bianchi puso en aprietos a su rival de cara a la revancha, que para colmo no logró recuperar al lesionado Romario y, sobre llovido mojado, además cayó en la final del campeonato carioca con Flamengo por 3 a 1, el domingo pasado.
Todo indica que el conjunto boquense es, de los dos, el que mejores posibilidades tiene de acceder a la próxima ronda, pese a que sus jugadores insisten en que por tratarse del conjunto carioca el rival a enfrentar, "no existen garantías y seguridades" de tener la clasificación asegurada.
La cautela de Bianchi
"Faltan 90 minutos y habrá que estar muy concentrados, porque este equipo brasileño tiene mucho oficio y Romario es sólo un engranaje de una maquinaria que habitualmente funciona muy bien", expresó Bianchi.
Además, el Virrey completó: "La clave será monopolizar la pelota y tratar de manejarla durante todo el partido. Igualmente en esta clase de enfrentamientos no hay que tener muy en cuenta el resultado que logramos en Brasil. Sería un error plantear el partido pensando en el 1 a 0".
La baja de su principal estrella, lesionado en la pierna derecha, obligará al entrenador Joel Santana a mantener a Viola junto con Euller en el ataque de su equipo, mientras que en Boca, pese a que el director técnico no confirmó la formación, se supo que no habrá mayores modificaciones respecto del conjunto que jugó en Río de Janeiro.
Una de las características que tiene el conjunto auriazul es que sube notablemente su rendimiento cuando el rival está en desventaja y queda obligado a abrirse y atacar, ya que con espacios disponibles Juan Román Riquelme, su eje creativo, es demoledor en las asistencias a sus compañeros de avanzada.
El partido, por la ventaja lograda por el conjunto local en el Sao Januario carioca y por tratarse de la Libertadores el único objetivo boquense para el primer semestre del año, convocará a una multitud en la Bombonera, ya que ayer hubo una gran demanda de localidades, tanto populares como plateas.
La Ciudad
