Debido a la falta de pago de los salarios adeudados, trabajadores de Aerolíneas Argentinas y Austral demoraron ayer la salida de un vuelo de Iberia, en el marco de una profundización de las medidas de fuerza en rechazo al incumplimiento del gobierno y de la española Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (Sepi). Asimismo, amenazaron con impedir los vuelos en todo el país si no se resuelve el conflicto. La primera acción de los trabajadores agrupados en la Asociación de Personal Aeronáutico (APA) y otros sindicatos del sector fue demorar anoche el despacho en Ezeiza del equipaje de unos 200 pasajeros del vuelo 6844 de Iberia, con destino a Madrid. Ante el hecho, efectivos de la Policía Aeronáutica intervinieron y se produjeron serios incidentes. Durante la tarde de ayer, el titular de APA, Ariel Basteiro, había advertido que "se decidió empezar con acciones gremiales inmediatamente con toda nuestra fuerza en función de demostrar el incumplimiento de la Sepi y del gobierno argentino en pagar nuestros salarios" y adelantó que "en caso de que la empresa corra peligro de cierre, se va a paralizar todos los vuelos aerocomerciales en todo el país". Si bien la ministra de Trabajo, Patricia Bullrich, había anunciado que ayer se depositaría la capitalización de 16 millones de pesos que Argentina debía a la Sepi -monto que sería utilizado por la empresa española para pagar los salarios-, finalmente el Ministerio de Economía no giró los fondos. Más aún, voceros de la Secretaría de Hacienda indicaron que sólo pagarían el dinero cuando finalicen las negociaciones, que llevan adelante en España, los ministros Bullrich, Domingo Cavallo y Carlos Bastos, y el titular de los trabajadores técnicos (Apta), Ricardo Cirielli.
Sin acuerdo en España Las negociaciones llevadas adelante en Madrid entre los gobiernos argentino y español para destrabar la crítica situación de Aerolíneas pasaron ayer a un cuarto intermedio hasta hoy las 10 (hora española), pero Bullrich ya adelantó que los españoles le dijeron que no habrá financiamiento de la empresa si los gremios no aceptan el Plan Director, que contempla despidos, rebaja de salarios y el cambio de los convenios laborales, entre otros puntos. "Si los sindicatos de aeronavegantes, liderado por Alicia Castro, y de técnicos, que conduce Ricardo Cirielli, no firman la aceptación del Plan Director no habrá financiamiento", dijo la ministra y agregó que "si lo firman la Sepi realizará una nueva capitalización de 350 millones de dólares en Aerolíneas Argentinas". La funcionaria, quien estuvo reunida por espacio de dos horas y media con el titular de la Sepi, Pedro Ferreras, estimó que "la situación es muy compleja y los términos de ésta son los mismos que cuando hace dos semanas me dirigí al país por la cadena oficial". En la reunión, que tuvo lugar en la sede de la Sepi, y en la que participó Cirielli, Ferreras planteó un ultimátum hasta hoy a las 10 para que los gremios firmen el acuerdo del Plan Director. Inmediatamente, Bullrich se comunicó con Argentina para pedir que Alicia Castro viaje de inmediato a España". Con respecto a la falta de pago de los sueldos, Bullrich precisó que "no se han hecho efectivos los salarios atrasados ya que Aerolíneas no ha aceptado el pagaré extendido por el gobierno nacional dado que el Banco Nación no puede hacerlo efectivo", por falta de "cash".
Flexibilización para pilotos En tanto, el gobierno argentino decidió flexibilizar por decreto las normas referidas a tiempo de trabajo, vacaciones y adiestramiento de pilotos de aviones comerciales. El decreto fue firmado por el presidente Fernando De la Rúa y los ministros Cavallo, Bastos y Horacio Jaunarena, el jueves a última hora. La medida forma parte de la batería de concesiones que el Ejecutivo está dispuesto a otorgar a la Sepi, que controla el 91 por ciento de Aerolíneas, con la justificación de evitar la quiebra de la empresa. El decreto instruye al Comando de Regiones Aéreas de la Fuerza Aérea Argentina para que en un plazo de 60 días derogue las actuales normas que controlan el descanso y el entrenamiento de los pilotos comerciales argentinos. Ante el hecho, el secretario gremial de la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (Apla), Luis Piotti, explicó que el aspecto de la normativa (reducción del descanso y el entrenamiento) que pretende cambiar el gobierno "responde a cuestiones médicas de fatiga" mientras que el decreto argumenta "cuestiones de competitividad" de las empresas. Por su parte, la diputada y titular del gremio de Aeronavegantes, Alicia Castro, criticó la "drástica flexibilización de las normas de seguridad" aérea, que responde a un "pedido de la Sepi, con el pretendido fundamento de reducir costos".
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