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Recursos ilegítimos

Los diputados provinciales del bloque reutemista presentaron un proyecto para anular los sanos efectos de la ley 11.627, sancionada por unanimidad con el apoyo del bloque de Obeid en una acción justiciera y honesta. Ahora, mediante un artilugio tramposo, se trata de restablecer la posibilidad de que ciudadanos que residen en una localidad puedan votar en otro pueblo, eligiendo al presidente comunal mediante la declaración de un domicilio trucho. Se ve que este mecanismo perverso favorece a varias comunas justicialistas porque la movida del bloque oficialista tiende a asegurar que no se puedan presentar denuncias sobre las inscripciones apócrifas en el padrón electoral, que en las pasadas elecciones fueron 27 mil, de las cuales más del 50 por ciento resultaron ciertas. En la ley actual el infractor puede alegar inocencia presentando pruebas documentales como una factura de servicios; pero el proyecto del bloque justicialista usa el recurso de invertir la carga de la prueba, con lo cual desvirtúa en la práctica la finalidad de la ley. Como ciudadano afectado por esta injusticia me pregunto: ¿hasta cuándo se van a usar estos recursos inmorales e ilegítimos en la actividad política?
Juan Heriberto Caivano