Oscar Lehrer
El seleccionado santafesino de básquetbol, categoría mayores, se quedó merecidamente con el título de campeón del torneo Interasociaciones que el último fin de semana se llevó a cabo en la capital provincial.
En el encuentro final, los dueños de casa dieron muestras de una marcada superioridad y doblegaron cómodamente a un desteñido Rosario por 101 a 82.
Pero al margen de este resultado y de que Santa Fe haya sido justo ganador, el torneo, bien organizado, deportivamente dejó mucho que desear. Lógicamente que los dirigentes por la mediocridad observada deben estar pensando en modificaciones, si es que pretenden que este torneo vuelva a tener razón de ser.
En un principio se dijo que de este Interasociaciones saldrían el equipo y cuerpo técnico para el próximo Campeonato Argentino, que se jugará entre el 30 de junio y el 7 de julio en Rosario y Santa Fe. De los sesenta jugadores que tomaron parte en esta ocasión, no más de cinco son los que están en condiciones de integrar el seleccionado de la provincia, los restantes están muy lejos.
Ante esta situación, para formar un equipo con reales pretensiones y posibilidades para acceder al título, los dirigentes federativos ya deben estar pensando en anular una reglamentación que ellos mismos implementaron, la de no permitir que más que cuatro jugadores de esta provincia que estén en la Liga Nacional puedan integrar el plantel santafesino.
Se viene el Argentino. Hay que pensar en grande, dejando mezquindades de lado. La provincia, reuniendo a los jugadores que están desparramados (que son muchos) por distintos lugares del país, está en condiciones de conseguir el título. Ahí hay que apuntar, otra alternativa no queda.
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La Ciudad
