Proscriben al obispo que se casó

El Vaticano condenó al religioso que contrajo enlace según los ritos de la secta Moon

El obispo africano que se casó el domingo con una mujer coreana en una ceremonia en Nueva York presidida por el reverendo Sun Myung Moon, no puede ser más considerado obispo de la Iglesia Católica, según se indicó desde el Vaticano.
En un comunicado inusualmente duro, el portavoz del Vaticano, Joaquín Navarro Valls, dijo que el arzobispo Emmanuel Milingo "no podría ser considerado un obispo de la Iglesia Católica" y que será objeto de "las sanciones canónica previstas". Estas sanciones, según se adelantó, serán las de una excomunión formal.
Milingo "causó una seria herida a la comunión que los sacerdotes, sobre todo, deben mostrar con la Iglesia", dijo Navarro Valls. De acuerdo con el Código Canónico, Milingo, nacido en Zambia, será excomulgado si el Vaticano lo considera culpable de apostasía o de violar las estrictas leyes de celibato de la Iglesia. Los sacerdotes no pueden casarse sin abandonar antes su ministerio.
Milingo, de 71 años y conocido por sus polémicas prácticas de sanación y exorcismo, se casó anteayer con la coreana María Sung, de 43 años, en una ceremonia en un hotel de Nueva York. La ceremonia, una de las 60 celebradas el domingo, fue conducida por Moon, quien eligió la novia para Milingo.
Antes de casarse, el obispo africano aseguró que como sacerdote célibe, el matrimonio había sido lo último que había ocupado su mente. "Es sólo a través de la orden de Jesús, y el consejo y el respaldo del reverendo y la señora Sun Myung Moon, que doy este inesperado y audaz paso, con el que he luchado en mi corazón por algún tiempo".
Pero el religioso también dejó entrever que es víctima de una persecución. "Las restricciones que están poniendo sobre mí me tienen contra la pared", indicó al resumir su historia de confrontaciones con el Vaticano, donde ha vivido por 20 años.
El matrimonio es el último de una serie de problemas que Milingo ha causado al Vaticano por lo que algunos consideran como métodos poco ortodoxos, como coloridas misas y reuniones, en las que realiza exorcismos.
El reverendo Moon, líder de la controvertida Iglesia de la Unificación, es elogiado por sus seguidores como el mesías. La secta ha sido relacionada con prácticas de culto al demonio en Zambia y también se la cuestionado por sus intereses económicos.