Diputados y Senadores salen al cruce por los gastos telefónicos

Los presidentes de las cámaras de Diputados y Senadores de la provincia, Alberto Hammerly y Marcelo Muniagurria, estimaron ayer que los gastos de la Legislatura en llamadas telefónicas son sensiblemente menores al millón de pesos, y aclararon que las facturas que abona el Poder Legislativo son bimestrales. Mientras Hammerly se comprometió a informar acerca de cuanto se gasta en su Cámara, Muniagurria reveló que el Senado paga entre 30 mil y 40 mil pesos bimensuales. Mientras tanto, el gobernador Carlos Reutemann prefirió no hacer ninguna declaración sobre el tema, ya que concierne al Poder Legislativo y no al Ejecutivo. No obstante, aprovechó para aclarar que el poder del Estado que él pilotea no es de los más gastadores.
"He solicitado que certifiquen exactamente lo que se gasta en teléfonos en las dos Cámaras", dijo Hammerly a La Capital durante la firma del pedido para que no se traslade el feriado del 20 de Junio. El encuentro fue ayer en el Monumento Nacional a la Bandera, y en la oportunidad los presidentes de las Cámaras defendieron el consumo telefónico de los legisladores, que este diario pusiera en tela de juicio el domingo. En aquella edición se hacía una proyección anual para ambas Cámaras a partir de un gasto presuntamente mensual en Diputados, con el cual se realizó el cálculo de consumo por línea, que se multiplicó por la cantidad de líneas que había en toda la Legislatura y por los meses del año.
Los presidentes de ambas Cámaras se manifestaron al respecto. Los dos advirtieron que las facturas son bimensuales y no mensuales, lo que reduce significativamente la proyección anual. El vicegobernador y presidente del Senado aclaró además que las cien líneas telefónicas que posee la Cámara alta son en su mayoría internas, y no de salida directa.
Hammerly recordó en cambio que desde que asumió en diciembre del 99 comenzó una "racionalización administrativa" en la Cámara baja. "Son muchos los gastos que hemos reducido y muchos los que podemos reducir", comentó.
Luego defendió la ley que indemniza los retiros voluntarios con 2,5 sueldos por cada año trabajado. "Son ventajosas, es cierto, pero es la única forma de que podamos reducir el número de planta permanente. Cuando me hice cargo, el 10 de diciembre de 1999, eran 621 empleados, y llegué a 495 durante el 2000. Este año pensamos reducir la planta en 200 personas más", proyectó, para recordar que "todos los bloques apoyaron la iniciativa y hasta existe la posibilidad de discutir una disminución del número de legisladores. Claro que para esto se requiere una reforma constitucional", remató.