Hubo careos en la causa de los remates arreglados

El juez Carlos Alberto Carbone careó ayer al martillero Amadeo Chaina con un matrimonio que lo acusó de pedirle dinero para arreglar el remate de su propia casa y permitir así que pudieran volver a comprarla. Mientras los denunciantes ratificaron que Chaina les pidió 5.000 pesos como adelanto para digitar el resultado de la subasta, el martillero negó los cargos y dijo que actuó dentro de los marcos legales.
Chaina, que es tesorero de la Asociación de Martilleros, está detenido junto con su colega Rosanna Fagniani y los particulares Roberto Cozzolino y Alberto Conde. Todos están sospechados de integrar una organización (la liga) que digita los remates y lucra con ellos, comprando propiedades a bajo precio y revendiéndolas en sumas muy superiores, en muchos casos a sus propios dueños.
Dos de las personas que denunciaron estas maniobras dijeron ayer que Chaina los visitó en su casa dos días antes de que se las remataran, les explicó qué debían hacer para comprar la propiedad en la subasta y hasta los llevó a ver un remate para demostrarles cómo operaba.
También dijeron que les pidió 5.000 pesos, que ellos ofrecieron un cheque por ese monto y que el martillero rechazó esa forma de pago con el argumento de que sólo recibiría dinero cash. El matrimonio finalmente perdió la casa porque Chaina la subastó a otras personas.
Paradójicamente, nadie sabe cómo es que Chaina intervino en esta subasta, que en realidad debió estar a cargo de otro martillero. Esta persona, identificada como Carlos José Berrás, era buscada intensamente por la policía, pero ayer envió un fax desde Paraná diciendo que padece un cuadro de salud que por ahora le impide venir a declarar ante el juez Carbone.
Además de las cinco detenciones, el juez interviniente también ordenó, la semana pasada, un allanamiento en la sede de la Asociación de Martilleros (Entre Ríos al 200). Duró cerca de seis horas y fue realizado por personal de las Tropas de Operaciones Especiales (TOE).
Según trascendió, el allanamiento se centró en las oficinas del tesorero de la entidad, Amadeo Chaina. Entre el material incautado, hay videos, expedientes judiciales y agendas personales.