San Lorenzo sostuvo la punta del Clausura con una nueva goleada. Otra gran demostración de autoridad y contundencia que hizo delirar a la enorme cantidad de hinchas que lo acompañó en la importantísima victoria por 4 a 0 sobre Chacarita, que le permitió seguir arriba junto a River. El uruguayo Sebastián Abreu abrió la cuenta con un tiro penal, Leandro Romagnoli y Raúl Estévez estiraron el marcador a tres, y Abreu convirtió otro penal para cerrar la chapa, justa por donde se la mire. Al igual que en la fecha anterior, cuando goleó 5 a 0 a Estudiantes, San Lorenzo volvió a mostrar un muy buen nivel de juego, su principal argumento para soñar con el título cuando faltan tres fechas para el final. Después de los primeros minutos de estudio, el conjunto dirigido por el chileno Manuel Pellegrini salió decidido a adueñarse de la pelota y del dominio territorial. El planteo fue tan simple como efectivo: buscó casi siempre por los costados y tuvo en Romagnoli a un conductor decisivo a la hora de darle la puntada final a cada ataque. Y la apertura llegó sobre los 20, cuando Diego Rivero empujó a Estévez dentro del área y el árbitro Daniel Giménez, quien reapareció tras una prolongada inactividad por lesión, cobró el penal que Abreu transformó en gol con un tiro bajo y contra el palo izquierdo. En desventaja, Chacarita se despertó. Carlos Moreno entró en contacto con la pelota con mayor asiduidad y Rivero lo acompañó en la creación. Sobre los 35, Chacarita tuvo su llegada más clara. Rivero protagonizó una gran corrida y alargó para el paraguayo Hugo Brizuela, a quien Saja le tapó el disparo con el pecho, en brillante intervención. Sin embargo, cuando mejor estaba jugando Chacarita, los azulgranas alcanzaron el segundo. Juan José Serrizuela inició un contragolpe tocando para Tuzzio, éste hizo la pausa y habilitó a Romagnoli, quien sacó su remate cruzado y goleador. La parte final empezó con emociones. A los 8, Rivero se fue expulsado por doble amonestación y, tres minutos más tarde, San Lorenzo se puso 3 a 0 después de una muy mala salida de Vivaldo, quien se molestó con un compañero y permitió que Estévez convirtiera con un toque suave al segundo palo. Si el panorama de Chacarita ya era sombrío, sobre los 18 se oscureció todavía más. Vivaldo salió inconscientemente del arco, lo tomó sin necesidad a Romagnoli y Giménez sancionó penal. Abreu volvió a darle fuerte, pero esta vez más hacia el medio, y Vivaldo se tiró nuevamente hacia el otro costado: 4 a 0 y asunto terminado. San Lorenzo se dedicó a reservar energías pensando en el crucial clásico del domingo ante Boca, porque Chacarita ya había bajado los brazos desde hacía rato.
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