Año CXXXIV
 Nº 49.122
Rosario,
domingo  20 de
mayo de 2001
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Cuatro estrenos de cine en la mira de Escenario

"Con ánimo de amar", "Sunshine", "La momia regresa" y "Drácula 2001", cuatro de los seis estrenos de esta semana en los cines de Rosario en la mira de Escenario. La lista se completó con "Telaraña" y "Enemigo al acecho".

"Con ánimo de amar"
Won Kar Wai hace películas arriesgadas y de gran belleza pero a veces se enamora demasiado de su producción y se extiende innecesariamente, Este es el caso de "Con ánimo de amar", un filme para no dejar de ver, pero que se excede. Wai podría haber terminado mucho antes la película sin que se altere y evitado el cansancio, porque el planteo del filme sorprende pero después de insistir demasiado se acerca al borde del aburrimiento, del que por fortuna se retira.
La historia es sencilla y trágica. Los matrimonios Zhen y Wang se mudan el mismo día a un hotel familiar. El señor Zhen se la pasa viajando y la señora Wang generalmente sale de la ciudad para visitar a su madre enferma. La señora Zhen y el señor Wang traban conocimiento y por una serie de coincidencias descubren que sus respectivos cónyuges mantienen una relación secreta de amantes.
El descubrimiento los acerca y los hace vivir el morbo de imaginarse cómo se sedujeron sus cónyuges. El filme también habilita la lectura de la historia como el juego de dos amantes que se divierten pesando que son engañados.
De una belleza seductora, para disfrutar a cada momento, "Con ánimo de amar" es una película singular, apta para quienes no tienen apuro en salir de las salas, tal como lo anticipa el generoso trailer que desde hace al menos un mes anunciaba a esta película en los cines de la ciudad.
Cal: 4 estrellas \F.T.

"Sunshine"
El proyecto del veterano director húngaro István Szabó ("Mefisto", "Encuentro con Venus") era por demás de ambicioso: contar la historia de su país a lo largo del último siglo a través de tres generaciones de una pujante y decente familia judía. Con semejante propuesta, a Szabó no le quedó más remedio que hacer una película de tres horas, pero de ninguna manera se trata de un melodrama épico interminable, autorreferencial o compasivo.
Con un riguroso planteo histórico y un excepcional poder de síntesis, el director ensaya una reflexión sobre la pérdida de la identidad, mientras deja al descubierto la confusión entre el patriotismo y el apoyo a un régimen político y el destino de un país como inseparable del destino de los que viven en su suelo. Para eso se vale de la saga de la familia Sonnenschein, y sus tres generaciones traicionadas sucesivamente por la monarquía, el nazismo y el comunismo.
La película muestra a sus personajes como héroes anónimos y cotidianos, que reniegan, se equivocan y discuten sin que sus discursos suenen altisonantes. Igual los personajes de Szabó puede resultar artificiales o impostados a los ojos de una familia tipo actual, que ya no habla de política ni de ideales sino de plazos fijos y ofertas de supermercado.
Más allá de los mensajes, "Sunshine" posee una belleza formal, en la fotografía, la ambientación y las actuaciones (brillante Ralph Fiennes) que muy pocas películas tienen en la actualidad.
Cal: 4 estrellas \C.T.

"La momia regresa"
"La momia regresa" trae nuevamente a la vida a los personajes de la primera parte. La cronología de los hechos no tiene demasiada diferencia con su predecesora: tal como ocurría al principio los siniestros personajes regresan a la vida en el Museo Británico, esta vez en un sótano hasta donde fue transportado lo que quedaba del ambicioso y maligno sacerdote Imhotep, junto a una corte de fieles seguidores.
El sujeto, que una vez más regresa con sus huesos apenas recubiertos de piel, debe reconstituir su anatomía absorbiendo a sus víctimas a bocanadas. Las novedades radican en que esta vez, luego de completar la tarea, no le bastará con enviar hordas de alimañas asesinas.
Además, para de una vez por todas tener el poder que le permitirá gobernar al mundo, deberá acabar con un guerrero que transformado en un enorme escorpión. El monstruo permanecerá en hibernación hasta que se realice un complicado ritual que lo devolverá a la vida.
La fábula corre por los carriles conocidos, mientras la acción no se detiene, apoyada por efectos especiales que no por conocidos dejan de tener un resultado efectivo. Mucho de ellos ya fueron vistos en la primera parte, como la cara de Imhotep en una enorme ola (antes era en la arena), los millones de escorpiones asesinos, los ejércitos, o las escenografías del antiguo Egipto.
Cal: 3 estrellas \R.B.

"Drácula 2001"
El cine se vio tentado muchas veces a imaginar el origen divino de Drácula, pero jamás llegó al atrevimiento de emparentar la razón de ser del conde chupa sangre con Judas Iscariote. A esta antojadiza derivación que pondría al borde del espasmo al mismísimo Bram Stoker arribó "Drácula 2001" ("Dracula 2000" en el original). Y encima sin humor, ironías ni parodias de por medio. Sólo un par de referencias forzadas que remiten desde el clásico Drácula hasta "La danza de los vampiros" de Roman Polanski.
Luego de una breve introducción donde el príncipe de las tinieblas atraviesa la bruma de altamar embutido en su ataúd abandonado en la bodega de un barco, la historia de "Drácula 2001" continúa en Londres en el año 2000. Un anciano cazavampiros -que llegó a fines del siglo XX inyectándose diariamente la propia sangre de Drácula- conserva al conde encerrado en una bóveda de alta seguridad. El conde, que logrará despertar de su letargo cuando unos ladrones se roban el macabro ataúd, buscará vengarse de su cancerbero seduciendo y mordiendo el cuello de su hija que vive en Nueva Orleans y que trabaja en una de las sucursales de la cadena Virgin de discos. Aquí todo es posible: destellos, vampiros kun-ku, el logo de Virgin que aparece más veces que los colmillos puntiagudos (como si fuera una producción de Pol-ka) y una ingenuidad argumental al borde del ridículo. Lo mejor, la inquietante "Void The Lights" que interpreta Pantera en la banda sonora. Lo peor, el resto del filme.
Cal: 1 estrella \J.L.C.



"Con ánimo de amar": El fulgor de la morosidad.
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