A más de dos años del asesinato del chico Mariano Díaz, nadie sabe quién o quiénes lo mataron ni cuál fue el móvil del crimen. Los únicos dos detenidos en el marco de la investigación judicial quedarán libres en horas, luego de que la Cámara de Apelaciones cambiara la imputación de partícipes de homicidio por la de encubrimiento. Otros cuatro sospechosos detenidos y procesados pocos meses después del hecho también quedaron libres hace ya mucho tiempo, y ahora la investigación corre el riesgo de diluirse irremediablemente por el paso del tiempo.
Mariano Díaz fue asesinado el 19 de febrero de 1999, cuando tenía 13 años. Un año después, el 2 de marzo de 2000, las Tropas de Operaciones Especiales (TOE) de la policía detuvieron en Río Gallegos (Santa Cruz) a Isabel del Valle Moyano y Claudio Adrián Ibáñez por participar en el crimen. En diciembre, el juez Jorge Eldo Juárez los procesó como partícipes de homicidio, aunque ambos apelaron y la resolución fue revisada por la Sala II de la Cámara Penal.
Ahora, los camaristas Juvencio Mestres, Ramón Ríos y Humberto Giménez mantuvieron el procesamiento pero cambiaron la acusación: de partícipes de homicidio la bajaron a encubrimiento. La modificación permite la excarcelación de los imputados, aunque no interrumpe la investigación y no los desliga de la causa, al menos por ahora.
Una trama oscura
Moyano e Ibáñez se habían convertido en sospechosos a partir de la declaración de un chico apodado Cabe, que conocía a Mariano y probablemente fue la última persona que lo vio con vida. Cabe declaró ante un juez de Menores que vio cuando Moyano disparaba a la cabeza de Mariano, en su casa y delante de su hijo apodado Caíto. Moyano negó categóricamente esta versión y contó otra historia: según ella, Mariano se suicidó delante de Caíto y Cabe, y ella sólo se ocupó de conseguir que otras personas hicieran desaparecer el cuerpo y el arma para no involucrarse. Pero el juez Juárez jamás creyó en esta versión porque la mujer incurrió en muchas contradicciones.\Cabe y Caíto cambiaron muchas veces su declaración, y esto empantanó la investigación. Sin embargo, Juárez intentó reconstruir pacientemente los hechos y llegó a una conclusión: para él, Mariano fue asesinado en casa de Moyano y tanto la mujer como Ibáñez, que era su concubino, estuvieron involucrados en el crimen.\Pero ahora la Cámara consideró que no hay pruebas sobre la participación de Moyano e Ibáñez, quienes sin embargo conocerían cómo fueron los hechos y estarían encubriendo a los homicidas. Por esa razón cambiaron la acusación y sólo mantuvieron el procesamiento como encubridores, algo que automáticamente les abre las puertas de la excarcelación.\Juárez ya había procesado a Saúl Rodríguez, Sebastián Rego y los hermanos José Luis y César Alejandro Gamarra como partícipes del homicidio. Pero después la misma Cámara los desprocesó al considerar que las pruebas sobre su participación eran insuficientes.
La Ciudad
