Santa Fe.- La Dirección Provincial de Obras Hidráulicas reconoció que existen demoras en la licitación de las obras de los Bajos Submeridionales requeridas para acabar definitivamente con la cíclica guerra del agua, que en las temporadas húmedas enfrenta a productores y pobladores de Chaco y Santa Fe.
En ese sentido, la repartición señaló en un informe que "las zonas del sudoeste chaqueño, que tienen como centro a Santa Sylvina y son las que desaguan en las proximidades de Gato Colorado, en Santa Fe, aún no tienen conexión con la Línea Paraná, pues resta la construcción del Tramo IV -tercera y cuarta sección- que actualmente se encuentra en proceso de adjudicación en la Subsecretaría de Recursos Hídricos de la Nación".
La Dirección de Obras Hidráulicas de la provincia sostuvo que "el funcionamiento de la obra Línea Paraná de los trabajos de saneamiento hídrico de los Bajos Submeridionales que favorecerá a distintos sectores productivos de Chaco y del segundo Estado argentino", para recordar a renglón seguido que fue Carlos Reutemann en 1992, junto a su par del Chaco de entonces, "quien inició los trabajos hídricos que actualmente están en desarrollo" y en referencia a una primera etapa que se solventó con "los recursos dispuestos en ese momento por ambas provincias".
"El tamaño de la obra establecido en ese momento y que se encuentra en ejecución, compensaba los canales construidos desde las zonas altas de la dorsal agrícola chaqueña, que impactaban en el norte de la provincia de Santa Fe, convirtiendo a esa región en improductivas. El estado de avance del emprendimiento construido permite la conexión de todos los colectores que desaguan en el Tramo III, que corresponden a las zonas aledañas de Villa Angela y Du Gratty, en el Chaco", dice la dependencia más adelante.
Recuerda también que "en esta misma licitación están incluídas obras complementarias en los Tramos II y III, que apuntan al mejoramiento del funcionamiento en su conjunto", y enumera que dichas obras son la ampliación del alcantarillado bajo los terraplenes de los caminos y mantenimiento de las obras de incorporación lateral, que significan respectivamente la anulación de las interferencias al escurrimiento y el control de la entrada del agua al canal en período de aguas bajas. En el caso del Tramo II, se incluye una limpieza de la sección del canal, que ha sido objeto de procesos erosivos. Otras, complementarias en la zona urbana de la localidad de Los Amores para reforzar el sistema de defensa contra inundaciones.
Efectos de lo construido
Las obras de la Línea Paraná ejecutadas impactan principalmente en el extremo norte de los departamentos Vera y General Obligado. Si bien estas áreas se denominan de "beneficio emergente", debido a que su objetivo principal es el traslado de excedentes de la dorsal agrícola chaqueña, el impacto en ese sector es decisivo.
Los trabajos troncales transitan por la provincia de Santa Fe por un área anegable, donde el uso ganadero extensivo se sustenta en muchos casos y con muy buenos rendimientos con el manejo de pastos de agua dulce, que se desarrollan en forma natural con pequeñas alturas de agua en superficie.
La existencia de los canales edificados en la provincia de Chaco y la ocurrencia de lluvias cada vez más intensas y persistentes, hacía que esa zona tuviera inundaciones muy prolongadas que inhiben la explotación apropiada para el área.
Por otra parte, la infraestructura vial era permanentemente rebasada por el agua y sistemáticamente destruida, haciendo que la incomunicación agregara daños mucho mayores en el manejo económico de la región. De acuerdo a lo indicado por el organismo hídrico santafesino, la presencia de la obra produjo una fuerte revalorización de las actividades económicas de la región.