Sobre calidad y excelencia aplicada a la gestión de salud, el 11 del corriente disertará en nuestra ciudad el doctor Osvaldo Artaza Barrios, prestigioso cardiocirujano de Chile, director del Hospital Luis Calvo Mackena, de Santiago, y asesor del Ministerio de Salud de ese país. El profesional posee una vasta experiencia en cardiología y cirugía cardiovascular infantil, además de desempeñar el máximo cargo directivo en el hospital de la capital trasandina. Merced a su labor gerencial al frente de dicha unidad de salud logró ubicar a la institución entre las más importantes del país vecino.
Osvaldo Artaza Barrios sostiene que tres son los elementos que le permitieron alcanzar una visión más integral de la salud, el paciente y el servicio de salud: actualización permanente de los conceptos médicos de su especialidad; estudio y profundización de los conceptos de calidad y excelencia aplicada a la gestión de salud y total conocimiento de la institución que dirige. Antes de su visita dialogó con La Capital sobre temas vinculados con su exitosa gestión gerencial al frente del servicio de salud pública.
-¿Cuál es la misión institucional del hospital que Ud. dirige?
-Ofrecer servicios pediátricos de excelencia a los niños, beneficiarios del sistema público, con humanidad, calidad y eficiencia.
-¿Cómo ha sido el proceso de implementación del modelo de mejora continua de la calidad, en el marco de brindar los mejores servicios de salud a su alcance y la capacitación paralela que en aquel sentido debió impartir al personal del hospital ?
-Significó un profundo cambio cultural, que tuvo como fundamentos, lo siguiente:
u El paciente y su familia deben dejar de ser objeto de nuestra mejor asistencia médica y de servicios, pasando a ser sujeto. Esto implica el concepto de paciente-cliente.
u El cambio de cultura sólo se consigue tras consolidar una transformación de las costumbres y la modificación de los comportamientos, lo que requiere esfuerzo y tiempo.
u La calidad aplicada a los servicios de salud es una actitud. Se trata de introducir en todos los ámbitos del hospital la dinámica de la mejora y el cambio continuo.
u La calidad no debe ser vivida como una obligación, sino como un valor compartido, un hecho de actitud cotidiana.
u La satisfacción del paciente no sólo debe ser resultado de la calidad técnica, sino que depende de un conjunto de factores que a veces no le damos importancia, pero en el cual están involucradas todas las personas que forman la institución.
u Los cambios verdaderos se hacen con las personas y para las personas, con satisfacción de todos los trabajadores y una adecuada calidad de vida y desarrollo personal en el trabajo.
-¿Cuál es su visión de un hospital público?
-Brindar una atención integral de alta excelencia y resolutividad; ser una organización autónoma y descentralizada, en un clima laboral de respeto, perfeccionamiento, bienestar y desarrollo personal.\-¿Cuáles son las expectativas de esta visita a Rosario y porqué piensa que será de utilidad para los profesionales?\-Pretendo trasmitir mi experiencia profesional y una visión de la calidad total aplicada a la salud, que si bien en mi caso se ha concretado en un efector público, es de perfecta aplicación en el sector privado. En este momento de cambio que vive la Argentina, con la modificación y desregulación del sector de la salud, esta es una oportunidad para desarrollar los sistemas de calidad total.
La Ciudad
