José Calero
El industrial textil José Ignacio de Mendiguren asumirá el jueves próximo como nuevo titular de la UIA, una de las cámaras más importantes del país. Exitoso empresario, De Mendiguren dijo que llega al máximo puesto de conducción de la central fabril con el objetivo de plantear con precisión las políticas activas que la industria necesita. "Hay que recrear las condiciones para que sea negocio producir en la Argentina", le dijo a La Capital en su despacho de director del Banco de la Nación Argentina, otro de los cargos que ejerce en la actualidad.
"Hace falta un proyecto productivo de país que agregue valor para poder crecer en exportaciones y la calidad del empleo", señaló De Mendiguren, pero advirtió que "a esto no se llega sin estrategia, ni haciendo la plancha, ni con piloto automático, sino con una visión de país consensuada entre los argentinos, con un proyecto motivador". El futuro titular de la UIA dio otra clave de esa estrategia al señalar que "sin la Aduana funcionando eficientemente, no hay sector productivo posible".
-¿Cree que los mercados quisieron echar a Cavallo?
-Pienso que no. El mayor problema es que los ganadores del modelo anterior lo hicieron a costa de las pérdidas o transferencias de ingresos de los perdedores. Ahora que se abre una instancia nueva están preocupados. Es necesario lograr un equilibrio. Hay sectores monopólicos, que no compitieron, como el financiero, el de empresas privatizadas y el de hidrocarburos, que tuvieron resultados brillantes mientras las industrias cerraban.
-¿Cómo se verifica en la práctica esta disparidad?
-En una economía que lleva 35 meses recesivos, el sector industrial sufrió deflación de sus precios, mientras que bancos de primera línea de la Argentina, que son filiales de entidades internacionales, obtuvieron aquí las mayores rentabilidades, del 12 por ciento promedio sobre sus ventas desde 1991, y las industrias tuvieron 1,5. Este modelo generó claros ganadores y perdedores.
-¿Y Cavallo qué rol juega en este esquema?
-Creo que el ministro intenta equilibrar estas fuerzas. Por eso hay resistencias de estos sectores que tuvieron claros privilegios para mantenerlos. Esperamos que entiendan que es imposible un modelo donde le va bien a algunos a costa de que le vaya muy mal a muchos otros.
-¿Cómo se sale de esta situación?
-Sin lugar a dudas hace falta un shock productivo. Argentina financió su falta de crecimiento con endeudamiento. Ahora debe hacer frente a sus compromisos. Y para eso hay que crecer. El crecimiento debe ser de tal calidad que resuelva el problema de ocupación y de integración territorial. La principal causa del déficit fiscal en la Argentina es la caída del nivel de actividad. Porque cada punto de caída en la recaudación implica una merma de 600 millones de pesos en la recaudación.
-Pero los sectores de poder económico financiero sostienen que con semejante déficit es imposible aplicar políticas activas.
-Que nos traigan un sólo modelo que pudo lograr desarrollo económico con las medidas que ellos proponen, que es la falta de estrategia. Las economías exitosas aplicaron planes de reconversión, la planificaron y la financiaron. Las empresas que llegaron hasta acá, demostraron que son eficientes y tienen un management al mejor nivel mundial. Es un activo que el país no puede dejar que se destruya.
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La Ciudad
