Como hace casi tres años, cuando fracasó una denuncia penal en su contra promovida por el entonces presidente Carlos Menem, el fiscal federal Carlos Stornelli -que acusó al ex mandatario como jefe de una supuesta banda que traficó armamento- obtuvo ayer un fuerte respaldo de sus colegas. Stornelli, en tanto, salió a denunciar presuntos intentos por desplazarlo de su función. "Hay algunos que aspiran a que yo ocupe otro cargo", expresó.
Diecisiete fiscales del fuero federal manifestaron su apoyo a Stornelli en una carta al procurador general Nicolás Becerra.
La nota fue firmada un día después del acto de "solidaridad" con Menem realizado por el justicialismo en el Congreso nacional, donde incluso fue entonada la marcha peronista.
"Fue una expresión de solidaridad que no es la primera vez que se hace en el Parlamento argentino. Desde el Congreso, muchos dirigentes de la oposición se expresaron en contra de mi gobierno. Lo que se hizo ahora es simplemente ser solidario con quien fue presidente de la Nación, que es presidente del PJ y que está en un proceso donde no tiene nada, absolutamente nada que ver", enunció ayer Menem, que irá preso si el juez federal Jorge Urso comparte el criterio de Stornelli.
Por otra parte, se ha puesto en marcha un recurso para que la Corte Suprema de Justicia declare que la venta ilegal de armas a Ecuador y Croacia constituyó, en realidad, una decisión del Poder Ejecutivo no susceptible de ser revisada por el Poder Judicial.
El planteo llegó a la Corte a través del abogado Francisco D'Albora (hijo), defensor del ex general del Ejército Antonio Vicario, que estuvo preso y será enjuiciado por el Tribunal Oral en lo Penal Económico Nº3, bajo cargos de contrabando agravado.
Los defensores de ex ministros procesados por la exportación clandestina de armas analizan la posibilidad de seguir el camino iniciado por D'Albora.
Mientras, los fiscales del fuero federal cerraron filas en torno a su colega Stornelli, que el martes último pidió la declaración indagatoria de Menem como presunto jefe de una asociación ilícita que habría vendido material bélico a países en guerra.
En una nota remitida a Becerra, los fiscales expresaron su "reconocimiento" y "respaldo" al procurador por haber reafirmado "la independencia y autonomía del Ministerio Público en la persona de nuestro colega Carlos Stornelli".
A fines de 1998, el fiscal pidió la indagatoria del entonces jefe del Ejército, Martín Balza (quien ayer recibió un mensaje intimidatorio y el dibujo de un ataúd), por su supuesta participación en la venta ilegal de armas. Y Menem, que era presidente, promovió una denuncia contra Stornelli ante el procurador.
Empero, la acción no prosperó porque fue desestimada por Becerra. Ahora, el fiscal acusó a Menem por un delito que ha puesto en riesgo la libertad del ex presidente, y consiguió el apoyo de sus pares un día después del acto solidario del PJ.
Paralelamente, el juez Urso se reunirá el próximo miércoles con el flamante presidente del Banco Central, Roque Maccarone, para brindarle precisiones sobre la información requerida a la entidad respecto de las cuentas y transferencias vinculadas al dinero sucio de la venta ilegal de armas.
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La Ciudad
