Quebec. - Los gobiernos del continente -con la excepción de Cuba-, expresaron su compromiso de terminar las negociaciones del Area de Libre Comercio de las Américas (Alca) en enero del 2005 y ponerlo en vigencia en diciembre siguiente. El Alca, que hará así del continente un solo mercado, estará también ligado al ejercicio de la democracia en los países beneficiarios, según la llamada "cláusula democrática", que ha sido igualmente aprobada en la reunión de Quebec.
El presidente venezolano Hugo Chávez firmó ambos acuerdos, pero expresó sus reservas en cuando al plazo de diciembre y la cláusula. Chávez, al formular el anuncio de su reserva horas antes de la clausura de la cumbre, consideró que la reserva era una posición menos extrema que la oposición al documento final.
Un plazo corto
Según Chávez, el plazo de diciembre del 2005 era muy corto para el debate que deseaba abrir en su país luego de ser aprobado el tratado en enero. El Alca, indicó el ex coronel golpista, será sometido primero a un referéndum y luego aprobado por el congreso. El primer ministro canadiense Jean Chretien, anfitrión de la cumbre, había anunciado el sábado en la noche la aprobación de la cláusula, que hace que "los beneficios de cualquier acuerdo a los que lleguemos sólo influirán a las naciones que se acojan a ella".
Según Chretien, la cláusula cubrirá todos los elementos del proceso de las cumbres, incluyendo el Alca, así como potencialmente las actividades del Banco Interamericano de Desarrollo, con el cual se emprenderán las gestiones de inmediato. El BID es el principal organismo financiero de la región, y desde la pasada cumbre de 1998 en Santiago ha destinado unos 15.000 millones de dólares al seguimiento y ejecución de los acuerdos.
Pero para el presidente venezolano, quien protagonizó en 1992 un intento de golpe militar cuando era teniente coronel del ejército, "la democracia representativa ha sido una trampa y casi nos llevó a la violencia. Unos señores que eran elegidos se sentían como con un cheque en blanco para robar, traicionar y atropellar", expresó el presidente, elegido al cargo por abrumadora mayoría en 1998.
El condicionamiento de democracia a los beneficios del libre comercio había sido sobreentendido desde la primera cumbre de Miami, en 1994. A partir de la reunión de Quebec, figurará por escrito en los acuerdos presidenciales. La adopción formal de la cláusula ha sido promovida por los gobiernos de Estados Unidos y Canadá, y figuraba en la agenda como tema medular junto con las fechas del Alca y las acciones para crear prosperidad y promover las condiciones para el despliegue pleno del potencial humano, sobre los cuales se pronunciará también la cumbre. El presidente Chávez expresó que la cumbre tenía un plan de acción de 280 puntos para ser tratados, lo que le parecía "una exageración".