Fabricarán ladrillos en base a fósiles de la Patagonia

Geólogos argentinos y españoles planean producir ladrillos en base a diatomeas, unas algas fósiles patagónicas de varios millones de años, y para ello efectúan pruebas pilotos en fábricas a ambos lados del océano Atlántico.
Así lo explicó el geólogo Vicente Marino, que participa del proyecto, al señalar que para hacer los ladrillos se utilizará un "polvo residual" de diatomeas que actualmente se acumula en la zona sudeste de Río Negro sin que se le de uso.
El emprendimiento está avalado por un convenio firmado entre el Ente para el Desarrollo de la Región Sur de Río Negro y el Instituto para los Materiales de la Construcción de Madrid.
El proyecto plantea aprovechar los importantes yacimientos de diatomeas -algas microscópicas fosilizadas- que se encuentran en la localidad de Ingeniero Jacobacci, a uno 200 kilómetros al este de Bariloche.
Pero las diamoteas ya tienen uso comercial dado que con ellas actualmente se producen los denominados lechos biológicos, una suerte de cama de pequeñas piedras blancas de gran absorción donde los gatos orinan y defecan.
Ingeniero Jacobacci es el principal productor de Argentina de diatomeas las que son allí procesadas -hay cuatro plantas industriales que se dedican a esa actividad- y envasadas para su posterior comercialización.
En tanto, Marino explicó que en la zona ya se han realizado las primeras pruebas pilotos mediante las cuales se han fabricado ladrillos con polvo de diatomeas. "Son ladrillos de moldes, más livianos y aislantes" aseguró el geólogo al describir las características de los bloques para construcción que a modo experimental se lograron en Río Negro con esos fósiles patagónicos. El geólogo dijo que en las próximas semanas miles de kilos de diatomeas patagónicas serán enviadas a España para que en una planta piloto de ese país se fabrique este nuevo tipo de ladrillos.
Marino también aclaró que el proyecto contempla asimismo la instalación de una fábrica de ladrillos de ese tipo en Ingeniero Jacobacci.