cartas

La ley del más fuerte

"El gran hermano", "El bar", "Expedición Robinson", la globalización, las economías de mercado, la legalización de la eutanasia, del aborto, todos son componentes de un mismo sistema: la supervivencia del más apto. Por la globalización peleamos buscando un lugar que nos posicione dentro de los estándares de aptitudes más elevados, porque sabemos que "tanto tienes, tanto vales". Cuando leo en los medios la importancia que se le da a este perfil de hacer televisión, cuando veo que sus integrantes ocupan páginas con declaraciones sin ningún tipo de aporte, me inundo de preguntas: ¿qué quiere mostrar la televisión ahora? o ¿qué no quiere mostrar? El mensaje que me llega es el de una sociedad voyeurista, que pugna por lograr lo que se plantea como éxito, que no es más que la banalidad de la fama . Por esto es capaz de legitimar la pérdida de principios. El premio económico por el que luchan es para aquel que logre llegar victorioso al final de la contienda. ¿Cuál es el fin? El rating... ¡Y pensar que en todas
las notas justifican las desinhibiciones ante las cámaras con la evolución
de la libertad! ¿Esto es libertad? ¿O será que los medios perdieron su ético objetivo, y lo que les importa es asistir expectante a sus propuestas para conformar la estadística?
Todas estas dudas buscan una respuesta lógica y coherente. Soy padre de familia, y necesito saber cómo educar a mis hijos. Quiero transmitirles el respeto por los valores, la moral y la ética, y quiero que esta enseñanza sea útil
para la vida, y que llegado el momento le den al César lo que es del César; y que reserven para ellos lo mejor.
Víctor Guillermo Almada