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El crimen que no se dio a conocer

El 5 de abril, cuando la policía de Rosario estaba ocupada pegándoles a los remiseros, fue asesinado a fierrazos en la cabeza Alberto Benjamín Yáñez en un terreno baldío, frente a su casa, ubicada en Iriondo y Amenábar. Como estaba sin los documentos, por el trabajo eficiente de dactiloscopia y de la gente que trabaja en la seccional 18ª me enteré, 24 horas después, de que mi hermano estaba en una heladera en la morgue judicial y el homicida preso. Escribo esto en homenaje a mi hermano y me pregunto por qué no salió en el diario, ni en ningún canal de televisión. ¿Será porque pensaron que era pobre y vivía solo, o porque a nadie le importa que alguien sea asesinado sin motivo aparente?
Obdulio Yáñez Rodríguez