Un día de sangre y fuego entre árabes e israelíes

Beirut, Gaza y Tel Aviv. - Ataques aéreos, disparos de artillería, bombas y tiroteo entre árabes e israelíes dejaron un saldo de por lo menos 2 muertos y 29 heridos hasta anoche. Los choques tuvieron lugar en el marco del conflicto entre Israel, por un lado, y los rebeldes palestinos y el Hizbolá libanés, por otro.
La organización radical proiraní informó del ataque con misiles a un puesto israelí y de la destrucción de un tanque Merkava cerca de la disputada área de Shebaa en el sur de Líbano. Como resultado de la destrucción del tanque, un soldado israelí perdió la vida.
En respuesta a esta acción, los israelíes dispararon unos 60 obuses en la región de KfarChouba-Shebaa, dijo la policía libanesa. Cazas israelíes dispararon misiles contra presuntas posiciones de Hizbolá en esta zona próxima a la frontera con Israel.
Por otro lado, una poderosa explosión desatada en una casa de un barrio este de la ciudad de Gaza, mató a una persona e hirió por lo menos a otras cuatro, informaron fuentes palestinas.
Las fuerzas de seguridad palestinas dijeron que el siniestro fue aparentemente causado por la detonación antes de tiempo de una bomba, que estaba siendo armada en la casa y que sería luego usada probablemente contra blancos israelíes. Directivos del hospital donde fueron atendidas las víctimas señalaron que dos de los heridos se encuentran en grave estado.
En los incidentes murió el palestino Mahamed Yassin Nassar, de 34 años, un conocido militante de la organización Hamas y que trabajaba en la seguridad del líder fundador del movimiento, Sheik Ahmed Yassin, indicaron fuentes palestinas.
En otro incidente también en la región de Gaza, por lo menos 24 palestinos resultaron heridos en choques ocurridos luego de que soldados israelíes hicieran un rastrillaje en un edificio que pertenece a servicio de inteligencia militar palestina, según testimonios. La casa, de dos habitaciones, estaba situada en el borde entre la franja de Gaza y Egipto, una zona de frecuentes choques entre soldados israelíes y rebeldes palestinos.
Los palestinos indicaron que, como resultado del rastrillaje, varias casas del área, además del cuartel, fueron demolidas por bulldozer israelíes. Este incidente tiene lugar luego de que rebeldes palestinos lanzaran más de 23 granadas de mano a soldados israelíes que patrullaban la frontera.
Mientras tanto, dos bombas detonaron asimismo por la noche en la ciudad israelí de Kfar Saba, al nordeste de Tel Aviv, con un saldo de una persona herida, informó la televisión israelí.
En el caso del primer atentado, que no causó heridos, no fue aclarado hasta el momento si se trató de un coche bomba o de un artefacto colocado entre dos autos estacionados. En tanto, tampoco hubo información acerca de si la explosión fue causada por los palestinos.
La segunda bomba causó un herido, quien fue llevado a un hospital de las inmediaciones, donde se consideró que su estado era "serio". No está claro hasta el momento si el herido es una víctima inocente o si se trata de quien colocó la bomba.
Ambas bombas fueron colocadas en una calle residencial próxima a la avenida principal, que habría tenido un gran movimiento de gente al momento de las explosiones.