La polémica para ocupar la banca que quedó vacante con la muerte en un accidente automovilístico de la diputada provincial del radicalismo Vivian Becker está alcanzando una gran virulencia entre los dos postulantes a ocupar ese escaño en la Legislatura santafesina: el ex concejal Rafael Samardich, ligado al sector que conduce el diputado nacional Juan Carlos Millet, y María Leonor Guido de Nirich, quien pertenece a Convergencia, que lidera el senador nacional Horacio Usandizaga. Los dos "contendientes" se explayaron ante La Capital.
"Convergencia interpreta mal y voluntariamente la ley. De lo que no tengo ninguna duda es que detrás de todo esto está el senador Usandizaga, que no se anima, no le da su caradurez para salir públicamente él a reclamar la banca para esta mujer. Quiero señalar la complicidad del bloque justicialista que el jueves se negó a cubrir la banca de la diputada Becker y tendría que haber hecho lo mismo que hicieron cuando renunció María Angélica Gastaldi para ser defensora del pueblo y la reemplazaron con un hombre. Así que acá actúan en tándem los justicialistas con Convergencia para que Usandizaga tenga éxito con su ocurrencia", dispara de un tirón Samardich.
Por su parte, Guido de Nirich aseguró que "la postura presentada es de carácter principista, y está relacionada con los derechos de la mujer muchas veces discriminados. Lo que se quiere hacer valer acá es el derecho de las mujeres de actuar y participar en la vida política, derecho que por su parte está defendido en la Constitución nacional y respaldado por normas dictadas de organismos internacionales" y agregó que optar por una análisis simplista "está lejos de la pretensión que se sustenta".
Samardich es un ex usandizaguista que se fue con Millet a la Lista Verde y que junto a los blancos y celestes (mimetizados en la Lista Naranja) buscan poner fin a más de una década de dominio partidario de Convergencia en la interna del 22 de abril. Según el lugar que ocupó en la lista de diputados provinciales elegida en 1999, Samardich entiende que debería ocupar la banca dejada vacante por la recientemente fallecida Lilian Becker.
Sin embargo, el ex concejal de Rosario se encontró con que por segunda vez su ingreso a la Cámara de Diputados podría frustrarse. La primera fue cuando se denunció al diputado usandizaguista Rubén Miret de estar involucrado en el pedido de coimas a presidentes comunales e intendentes del sur para el otorgamientos de planes de vivienda. Con el concurso de los peronistas, Miret fue suspendido y no expulsado u obligado a renunciar, como entiende Samardich que debió ocurrir, y dice hoy que ya entonces quedó demostrada la complicidad con la que el PJ actúa respecto de Usandizaga.
Mujer por mujer
Ahora tampoco pudo asumir el jueves pasado. Nirich, que figuró en la nómina radical del 99 debajo de Samardich, reclama el lugar argumentando que Becker accedió a ella por ser mujer, es decir, dando cumplimiento al porcentaje mínimo que la ley de cupo otorga a la mujeres en la conformación del cuerpo. Razón por la cual el reemplazo debe ser por otra mujer para no alterar la proporción que tutela la referida ley. Samardich rechaza el argumento y dice que los usandizaguistas no quieren perder una banca y miran sólo a través de la interna.
"Lo que se está discutiendo es ver quién asume como diputado. Así planteada, es una postura casi de coyuntura y elude la discusión de fondo", aseguró Guido de Nirich.
A los efectos de respaldar su posición señala que "lo que se busca en definitiva es que la norma constitucional se interprete positivamente, que se ponga en acción el espíritu de esa norma".
"¿Qué razonabilidad tiene -se preguntó- que para oficializar una lista de candidatos, se exija prolija y obstinadamente el cumplimiento del cupo femenino, si luego se da la espalda a ese objetivo, y en la integración funcional de la Cámara, se omite el mismo cupo?".
"Este tema -afirma la dirigente radical- se ha planteado política y jurídicamente, e incluye a todos los sectores que participan de esos ámbitos, no solamente del radicalismo". "Yo les digo a todos los sectores de mi partido que no es posible ver todas las acciones políticas con el cristal de una interna partidaria, y que no es posible ver detrás de cada reclamo una postura egoísta".
"Estoy gratificada por el apoyo recibido de muchas mujeres, incluso de integrantes de otros partidos políticos que ven en esta presentación un avance en la participación activa de la mujer. No podemos renunciar a cubrir los espacios políticos que nos corresponden", finalizó.
A su turno, Samardich aseguró que "detrás de la señora Nirich está Usandizaga porque la única finalidad que persigue Convergencia es la de intentar comprar alguna conciencia con la banca para la interna del 22".
Para Samardich, "el jefe de la señora Nirich es Usandizaga. Convergencia responde a Usandizaga y Convergencia actúa en complicidad con el peronismo. Es Usandizaga el que acuerda con Reutemann. Entonces él es el responsable. Ni él ni Reutemann, porque los diputados peronistas responden al gobernador, se preocuparon nunca por el cupo femenino".