Villa Constitución. - Al rechazo de numerosas instituciones locales a la obra licitada y adjudicada por la provincia para sanear el brazo inactivo del arroyo Pavón, donde se vuelcan los efluentes cloacales de la ciudad, se sumó ahora el desacuerdo de esos mismos organismos para con la propuesta municipal que sostenía la remodelación de la planta de cloacas como solución. Por el contrario, las instituciones -que también se oponen a la propuesta provincial- insistieron en la necesidad de reencauzar el curso del arroyo Pavón, una obra que proponen realizar con menos dinero del que invertirá la provincia (poco más de un millón de pesos), mediante la compra de una pequeña draga.
"Las instituciones que nos autoconvocamos la semana pasada en la Municipalidad (al conocer la adjudicación de la obra por parte de la provincia) planteamos que se ponga todo el esfuerzo en el reencauzamiento del Pavón. Una vez logrado esto, que se haga todo lo demás", explicó Luis Celis, estudioso de la problemática e integrante del Ente por el Reencauzamiento del Arroyo Pavón, un organismo creado el año pasado por ordenanza municipal.
En efecto, la obra adjudicada recientemente por el gobierno provincial a un costo de poco más de un millón de pesos consiste en extender la desembocadura de los líquidos cloacales, que actualmente se efectúa en un brazo inactivo del arroyo Pavón, aguas abajo en el arroyo Correntoso.
Discusiones
El gerente del Ente Autárquico Municipal de Obras Sanitarias (Eamos), Claudio Mauro, señaló la semana pasada el rechazo a esta obra y recalcó que las instituciones se habían pronunciado por "apoyar la alternativa ofrecida por la Municipalidad", consistente en la remodelación de la planta de tratamiento de líquidos cloacales, aunque fue rápidamente desmentido por Celis.
"Según el estudio realizado por la Universidad Nacional del Litoral, el desagüe pluvial (que se vuelca al Pavón) es tan peligroso como el cloacal. A esto debemos sumarle que la vecina localidad de Empalme también desagotará sus líquidos cloacales en el arroyo Constitución, que desemboca en el Pavón", explicó Celis.
"Por eso -añadió-, no estamos de acuerdo con la obra que encarará la provincia ni con esta alternativa planteada por la Municipalidad: sostenemos que reencauzando el arroyo se producirá un movimiento mayor de aguas que haría más llevadera esta grave situación y nos daría más tiempo para solucionar definitivamente este problema. Lo que se haga antes de esta obra sólo será un parche".
En ese sentido, Celis explicó la propuesta sostenida por un conjunto de instituciones de Villa Constitución: "Para hacer esta tarea se puede adquirir una draga pequeña por unos 200 mil pesos, que también significaría una inversión para el municipio y fuentes de trabajo. Así, con menos del millón de pesos que gastará la provincia reencauzaríamos el arroyo".
El problema del Pavón se generó en el año 1961, cuando una inusual crecida del curso de agua desvió su cauce natural, pero cuando la situación volvió a su natural normalidad la mano del hombre comenzó a aprovechar este nuevo curso y paralelamente procedió a taponar con diversos elementos el cauce natural. Posteriormente se construyó un precario puente y un taponamiento consolidado que se halla en la mitad del curso del arroyo.
Estos obstáculos impiden totalmente el paso de agua hacia el Paraná. En tanto, las piletas recolectoras de los desagües cloacales lanzan sus efluentes al cauce seco, quedando tales lodos a cielo abierto y generando una grave contaminación que afecta a miles de familias asentadas en sus inmediaciones.
La Ciudad
