A poco de desensillar en la jefatura del Senasa, Bernardo Cané, ya tuvo que atajar varios frentes al mismo tiempo. Con la erradicación de la aftosa como tarea casi excluyente en el corto plazo y un buen números de países comunicando el cierre de sus fronteras a las carnes y alimentos argentinos, las reuniones con unos y otros actores se suceden de manera vertiginosa. A pesar de ello, el flamante funcionario se hizo un espacio para dialogar con La Capital, en la que estableció los distintos parámetros por los cuales se manejará. El funcionario que coordinó el programa de erradicación de la enfermedad en los años 90 y que lideró la oposición a dejar de vacunar, proyecta acordar un plan común del Mercosur y pedir a Uruguay, país libre del mal, que sea el auditor de los procesos que está llevando adelante el país en esta materia.
-¿El plan definitivo para la radicación de la aftosa está listo?
-Prácticamente. Como líneas generales está la regionalización del país, el mantenimiento de zonas libres de aftosa (Patagonia), para lo cual se establecerán dos barreras, una en el paralelo 42º y otra en el río Colorado. En el norte del país también se colocarán barreras de control para mantener libre de la enfermedad a Mendoza, San Juan, La Rioja, Catamarca, Tucumán, Salta y Jujuy. Además, habrá una barrera en la Mesopotamia para contener a una región en la que con más de 10 millones de cabezas se han detectado pocos focos, menos de diez aproximadamente, aunque se vacunarán todos los terneros que salgan de esa zona con rumbo a invernada. La otra pata es vacunar masiva y generosamente en toda la zona central (La Pampa, Buenos Aires, Santa Fe, Córdoba, Santiago del Estero, Chaco y Formosa) en los dos próximos meses. Por otro lado, implementar un proyecto de saneamiento para identificar los campos que han tenido aftosa y propender lo más rápido posible, con el límite de un año, a su sacrificio sanitario en frigoríficos cuando estén productivamente en condiciones.
-Estas son las previsiones para el corto plazo, pero ¿cuál será el proyecto a largo plazo?
-El proyecto es que en cuatro años todo el país, arriba del río colorado, sea "libre de aftosa con vacunación".
-¿Cómo van a trabajar con las provincias, que hasta ahora jugaron cada una por su lado?
-Estuvimos reunidos el miércoles con las provincias de Entre Ríos, Santa Fe, La Pampa y Buenos Aires, consensuando todo esto. La idea es que ellos depongan las medidas unilaterales que ha habido por parte de algunas de ellas, Formosa-en su momento, Catamarca, La Rioja y Entre Ríos mismo, para que coloquen a disposición Senasa el pleno poder para ordenar el problema de la aftosa.
-¿La idea es reeditar lo que fueron las fundaciones en el pasado?
-Desde el punto de vista operativo, la idea es que sea hecho por las fundaciones, no como caso único sino propendiendo a que esto se haga al estilo que utilizó Entre Ríos y Corrientes, con una federación de fundaciones. No, por ejemplo, como en la provincia de Buenos Aires que hay 118 de estos organismos. Lo público y lo político deben estar unidos para que exista la menor cantidad de interlocutores.
-¿Está garantizada la cantidad de vacunas que se van a requerir para este programa?
-Sí, para este núcleo central hay vacunas para cubrir las necesidades de abril y mayo.
-¿El rifle sanitario quedó descartado totalmente?
-No, el rifle sanitario es para el comienzo de la emergencia o para zonas que por su condición de aislamiento permitan garantizar el mantenimiento del status. Podría ser nuevamente en la Mesopotamia, pero no en otras zonas abiertas del país.
-Uno de los problemas que tuvo el área fue la financiación, ¿cómo solventarán todo este emprendimiento?
-Estamos trabajando con cuatro frentes a la vez: aftosa, negociación internacional, apertura de mercado y el de ordenar la casa. Tenemos el mayor apoyo de Agricultura y Economía para alcanzar los resultados, pero aún no puedo dar precisiones.
-¿En qué estado se encuentran las negociaciones con terceros países?
-Primero fue Uruguay, nuestro aliado natural y nuestro socio, al que debemos defender y no complicar, ya que es un país "libre de aftosa sin vacunación". Seguiremos el domingo y el lunes con Brasil, que es nuestro principal socio comercial y que también tiene un promisorio desarrollo de la ganadería. Por último, continuamos el mismo lunes y martes con Paraguay, ya que tenemos que mejorar la relación sanitaria con ese país.
-El planteo es atacar a la aftosa regionalmente. Un plan común del Mercosur.
-Completamente. Esa es la idea central para no tener problemas en el largo plazo.
-De todas formas, ¿cómo cree que terminará este "mes de prueba" que le dio Brasil a la Argentina?
-Nosotros vamos a ir este fin de semana a discutir aspectos técnicos y esperemos que con técnicos nos pongamos de acuerdo.
-En anteriores gestiones hubo cierta confrontación entre la Secretaría de Agricultura y el Senasa. ¿Cómo será esta nueva etapa?
-No creo que sea igual. Tengo una muy buena relación con el secretario de Agricultura, Marcelo Regúnaga, ya que trabajé con él durante varios años en nuestra anterior gestión y al cual le tengo un respeto profesional. Además, la situación del país no da margen para disputas o personalismos. Trabajo y a la cancha. La gente del campo no entiende muchas veces que existen diferencias entre un municipio, provincia o Nación, sino que buscan cumplir un objetivo.
-¿Cómo se reconstruye la credibilidad perdida?
-No hablando, trabajando. Mostrando en el caminar conjunto, también con los más críticos, como el gobernador de Entre Ríos o Carbap, con ellos sumando desde adentro para recuperar un terreno perdido.
-¿Cuál será la estrategia para la reapertura de mercados?
-Básicamente mostrar cómo se reconstruye la trama de la ingeniería social que fue exitosa y que fue capaz de erradicar la aftosa. Explicando el programa. Mostrar la vocación de ser transparentes y honestos. Trabajar fronteras afuera con nosotros en Paraguay y ellos en la Argentina. Queremos que nuestro plan sea auditado, verificado y validado por Uruguay.
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La Ciudad
