Jerusalén.- Los palestinos amenazaron ayer con vengarse de Israel durante los funerales de seis de los suyos, desafiando así el anuncio de la Defensa israelí de una política más drástica contra los disturbios que entraron ya en su séptimo mes. En el poblado cisjordano de Naplusa, miles de personas participaron en los funerales de cinco palestinos muertos el viernes a manos de soldados israelíes, en uno de los días más sangrientos en las últimas semanas.
En la ciudad cisjordana de Ramala, los palestinos realizaron el funeral de una de las víctimas, de 21 años, llevando el cadáver al hombro y envuelto en una bandera palestina después que se reportó que unas 1.000 personas marcharon hasta un punto de control militar.
Serios incidentes
Las tropas israelíes chocaron ayer con los palestinos cerca del punto de control de Erez y el cruce comercial de Karni, fronterizo con Israel. El ejército dijo que había sido atacado por palestinos que lanzaron tres bombas incendiarias a sus posiciones. El ejército también reportó disparos durante la noche en asentamientos judíos en Cisjordania y en las afueras de Jerusalén.
Mientras tanto, fuentes hospitalarias dijeron que las tropas israelíes hirieron a 15 manifestantes palestinos durante disturbios que se registraron ayer después de una marcha a la que asistieron cientos de personas en Gaza con motivo del "Día de la tierra". El "Día de la tierra" conmemora la desaparición de seis árabes israelíes que murieron hace 25 años a manos de soldados durante una manifestación contra la expropiación de sus tierras por parte del gobierno. Entre los heridos hay dos niñas de dos y siete años.
La emisora del ejército israelí informó de que los manifestantes habían lanzado piedras y objetos incendiarios contra soldados en el puesto de control de Erez, en la frontera con Israel, y en el cruce de Netzarim, en el sur de la Franja de Gaza. También en Raffah, en la frontera con Egipto, se registraron enfrentamientos. Los militares respondieron con balas de acero recubiertas de goma, gas lacrimógeno e incluso munición real.
Las protestas se realizaron bajo la sombra del anuncio del ministro de Defensa israelí, Binyamin Ben-Eliezer, quien dijo que Israel estaba poniendo fin a su "política de tolerancia" frente a la rebelión palestina contra la ocupación israelí. "Hemos comenzado a responder. Había una política israelí de contención que en mi opinión ha terminado", dijo Binyamin Ben-Eliezer.
Las pasiones estaban inflamadas por una semana de atentados palestinos con bombas, ataques de misiles israelíes contra blancos de seguridad en Gaza y Cisjordania, y demandas del presidente George W. Bush de que los palestinos, en particular, hicieran más para frenar la violencia.