Libertadores: Boca venció a Cobreloa y ya está en octavos

Con justicia y algo de sufrimiento sobre el final, Boca Juniors logró anoche su clasificación a los octavos de final de la Copa Libertadores de América, tras derrotar como local a Cobreloa de Chile por 1 a 0, en un partido válido por el grupo 8 de la Copa Libertadores de América.
El único gol del equipo dirigido por Carlos Bianchi fue anotado por el volante Gustavo Pinto, de cabeza, a los 12 minutos del primer tiempo, mientras que en la segunda parte el mellizo Guillermo Barros Schelotto desperdició un tiro penal, a los 30'.
El desarrollo del partido se fue desvirtuando a raíz del anegamiento del campo, luego de la intensa lluvia que cayó sobre la ciudad de Buenos Aires antes y durante el encuentro.
No obstante, la cancha pesada no impidió que Boca fuese superior, porque siempre trató de inquietar a su rival apoyado en el talento de Juan Román Riquelme y la endiablada gambeta del mellizo Barros Schelotto, quien enloqueció al sector derecho de la defensa de Cobreloa.
Y así, con esa actitud dominante, al equipo de Carlos Bianchi no le costó casi nada ponerse en ventaja, ya que a los 12' se puso 1-0 luego de que Pinto, de cabeza, venciera al arquero argentino Claudio Mele, después de un centro de Riquelme desde el sector izquierdo.
En la segunda parte, ambos equipos se mostraron muy cansados y el ritmo del juego cesó, aunque Boca se mostraba superior. Los desbordes por la izquierda del Barros Schelotto seguían siendo el principal argumento del equipo de Carlos Bianchi, que tuvo varias ocasiones para aumentar la diferencia.
La más clara fue a los 30' cuando Barros Schelotto desvió un tiro penal junto al palo izquierdo, luego de que Rezende sancionara penal por una mano del zaguero Luis Fuentes.
A partir de ese momento, el equipo del argentino Oscar Malbernat se dio cuenta de que el empate estaba al alcance de la mano y comenzó a presionar y a preocupar a la hasta entonces segura zaga de Boca.
Ese pequeño cambio de actitud casi le vale el empate sobre el final, cuando el defensor Rodrigo Meléndez estrelló un potente remate en el palo derecho de Oscar Córdoba.
Sin embargo, esos embates finales no alcanzaron para cambiar el resultado y así Boca, en contraste con su floja actuación en el torneo local, se convirtió en el primer equipo clasificado para los octavos de final de la Copa.