Año CXXXIV
 Nº 49.063
Rosario,
miércoles  21 de
marzo de 2001
Min 19º
Máx 23º
 
La Ciudad
La Región
Política
Economía
Opinión
El País
Sociedad
El Mundo
Policiales
Escenario
Ovación
Suplementos
Servicios
Archivo
La Empresa
Portada


Desarrollado por Soluciones Punto Com






Castrilli demandó a Diego por el presunto delito de injurias

El ex futbolista Diego Armando Maradona sumó ayer una nueva causa judicial en su contra: el ex árbitro y actual funcionario bonaerense Javier Castrilli lo querelló por el presunto delito de "injurias".
Castrilli radicó la presentación ante el juzgado correccional a cargo de la magistrada Ana Bulacio de Rúa, a raíz de declaraciones de Maradona en distintos medios, en los que lo tildó de "soberbio", "payaso" y "cualquiera".
El ex árbitro y actual responsable de la seguridad en espectáculos deportivos de la gobernación bonaerense presentó un escrito de unas diez carillas ante la magistrada, en las que reprodujo declaraciones atribuidas a Maradona.
"En Argentina te hacés el honesto, juntás en una conferencia de prensa más de diez periodistas y te dan un cargo político. Es una vergüenza, lo meten (a Castrilli) como el que va a impartir orden como lo hacía en la cancha y en la cancha era un payaso", dijo Maradona, según la denuncia del ex referí.
Siempre de acuerdo a la denuncia, a la que tuvo acceso este diario, Maradona opinó que Castrilli "se quería hacer ver mientras dirigía partidos de fútbol para conseguir un cargo político y finalmente lo logró. Siempre fue un soberbio. Lo hacía todo pensando en su carrera política".
"Por favor, terminen de darle cargos en la política a cualquiera", disparó Maradona, al deplorar también la posibilidad de que el presidente de Boca, Mauricio Macri -a quien llamó, como lo hace habitualmente, "el cartonero Báez"- se postulara por el justicialismo a un cargo electivo por la Capital Federal.
Las declaraciones de Maradona fueron reflejadas por el diario deportivo Olé y el diario Crónica en sus ediciones de 31 de enero y en un reportaje concedido a Radio Mitre desde Frankfurt, Alemania, un día antes.
Tal como establece el procedimiento judicial en estos casos, la jueza Bulacio de Rúa deberá llamar a ambas partes a una audiencia de conciliación, en la que Castrilli y Maradona podrán dar por superadas sus diferencias y la causa quedará archivada.
Pero si el ex futbolista y el ex árbitro no concilian posiciones, la causa se dirimirá finalmente en juicio oral y público y Maradona podría ser condenado -en caso de ser hallado culpable- a una pena de prisión de un mes a un año o una multa de 1.500 a 90.000 pesos.


Diario La Capital todos los derechos reservados