General Motors y el Smata están al borde de un acuerdo

El gremio propuso que no haya más cesanteados este año. La empresa quedó en responder el viernes

La automotriz General Motors y el Smata (Sindicato de Mecánicos y Afines del Transporte) alcanzaron ayer un principio de acuerdo por el conflicto desatado a principios de mes a partir de un recortes de 102 puestos de empleo.
La compañía y el gremio de los mecánicos se volvieron a ver las caras ayer en la Secretaría de Trabajo en la sede local de la Gobernación. Allí el sindicato presentó una contrapropuesta a lo que había planteado anteayer la empresa y se discutió sobre bases firmes.
El arreglo se basaría en convertir 21 despidos en retiros voluntarios, y abonar a esos trabajadores un plus de indemnización del 60%. Y además se abonarán los salarios correspondientes al mes de marzo.
En este sentido, los trabajadores cesanteados aceptarían el cambio de despidos por "retiros voluntarios", lo cual estriba en una mejora en la remuneración monetaria, pero reclamaron el cobro de los haberes de marzo, punto que en principio a lo largo de la tarde ayer la empresa se los habría concedido.
La aceptación por parte de los trabajadores despedidos de la figura de retiros voluntarios implica un plus de indemnización del 60% sobre lo que establece la legislación laboral, que la compañía estipuló para este proceso de reestructuración.
Para poder llegar a la firma de un acuerdo sólo faltan ajustar un par de puntos, que la empresa se comprometió a responder pasado mañana.
Los representantes de la GM quedaron en analizar una propuesta que llevó ayer el sindicato. Se refiere a un pedido para que no haya nuevos despidos durante el 2001.Para evitar que se pueda llegar a ese tipo de medida, los sindicalistas plantearon la utilización del banco de horas que figura en el convenio de empresa.
El sindicato de mecánicos también pidió como parte del acuerdo que ante la posibilidad de que la situación económica mejore y la General Motors necesite incorporar personal, los 102 trabajadores que se retiraron tengan la prioridad.
Desde la empresa prefirieron evitar pronunciarse sobre estos dos puntos, ya que será analizada por las más autoridades de la compañía en el país. Anteayer, una vez que finalizaron los piquetes, el director de relaciones institucionales, Alberto García Carmona, había señalado que la política de personal de la empresa "dependen del mercado, si el mercado de venta de automotores cae un 80%. Todo puede ocurrir, pero ahora nadie tiene planes de más reducción de personal".
En base a lo que dejaron entrever las partes, todo indica que el viernes por la mañana se estará firmando el acuerdo que daría por finalizado un conflicto que entró en su tercer semana.
La actividad ayer en la planta de la marca del Chivo tiene en Alvear fue normal, luego de que el lunes los piquetes en los accesos a la fábrica sorprendiera a las autoridades de la compañía con una quema de cubiertas que se extendió desde las 6 de la mañana a hasta el mediodía, sin que ninguna persona pudiera ingresar.