Energía positiva: Cargar pilas

Todos consideramos como un valor positivo el disponer de mayor cantidad de energías. Una persona energética puede lograr el doble de resultados que el resto y encima disfruta de lo que está haciendo. También asociamos una mayor cantidad de energías con una existencia más vital y plena.
Aunque parezca mentira, el secreto de estimular a nuestra máquina para ser más energética es simplemente actuar con mayor energía aunque no nos sintamos demasiado dispuestos a hacerlo. Esto tiene un gran valor probado por la experiencia. Cuando actuamos energéticamente estimulamos al cuerpo, aumentamos el ritmo cardíaco y colocamos a la mente en alerta. Hay una tendencia natural hacia la conservación de energías cuando no nos acecha un peligro inminente. En el mundo actual esta tendencia de dejarse estar en lo físico sólo nos lleva a incrementar las tensiones emocionales, situaciones que podremos revertir rápidamente poniéndonos en movimiento.
Para sobrellevar esta natural tendencia a la apatía, el principal consejo es actuar con energías tanto si nos sentimos con ganas como si no. La consecuencia es que con sólo actuar con energías ya empezamos a ser más energéticos. Es lo mismo que sucede con la ética. A veces nos vemos tentados a no seguir en el camino más recto, pero si logramos sobreponernos y actuar éticamente, por este sólo hecho seremos personas más honestas a pesar de nuestras inclinaciones. El beneficio adicional es que al actuar con más energías estaremos estimulando a todo el sistema grandular a que responda en consecuencia, y ese flujo adicional de hormonas nos traerá una carga de energías extra que será el justo premio a nuestro esfuerzo por mejorar.
Mirta de Fussi, profesora de yoga