cartas

Un móvil muy particular

Ha llamado con creces mi atención, y la de las personas que frecuentan la zona del parque Alem, el ingenio de un hombre, que ronda los 50 años, para expender pororó. Este señor, siempre rodeado de niños que lo miran alegres, realiza toda clase de piruetas, anda en monociclo, hace malabares con un diábolo y cuenta infinidades de historias fantásticas. Las ancianas le compran semillitas con la excusa de mirarle los ojos azules. Además, creó un bote con ruedas, con el cual se moviliza por las calles como si estuviera en el río Paraná. Hay una cuestión que tiene que ver con su móvil tan particular: ¿tiene tarjeta verde?, ¿está registrado?, ¿qué pasa si entra en colisión con un automóvil particular, ya que no creo que esté asegurado? Lo único que podemos afirmar con certeza es que nunca el bote se hundirá en el pavimento, por lo que es inútil que lleve salvavidas.
Guillermo Morales (h)