Dos secuestros de fauna silvestre fueron realizados este fin de semana en la intersección de las rutas nacionales Nº34 y Nª19, al sur de Rafaela, por la unidad de Gendarmería Nacional con asiento en Rosario. Los animales, unas 50 tortugas y cuatro centenares de aves se encontraban en dos micros. Muchos de los ejemplares no llegaron a ser rescatados con vida dadas las pésimas condiciones en que se realizó el traslado.
Los secuestros se hicieron a la madrugada del sábado y durante la tarde del domingo pasados en dos micros que partieron de Santiago del Estero, informó Gendarmería.
Los animales se encontraban en el sector de carga de los micros en los dos casos. Según indicaron fuentes de Gendarmería, las aves fueron transportadas amontonadas en jaulas pequeñas, por lo que muchas de ellas murieron antes de ser rescatadas. Entre las variedades distinguieron jilgueros, cardenales y loros. Las tortugas se encontraban en una bolsa de nailon común. Todos los bultos carecían de identificación y rótulos y ningún pasajero se hizo responsable por los animales.
El comandante Carlos Arias, de Gendarmería, señaló que los animales viajaban con destino a Buenos Aires. En el caso de las tortugas, aseguró que algunas son vendidas a laboratorios para extracción de un aceite utilizado en cosmética, otras son compradas a particulares, algunas llegan a ser exportadas a Europa, donde el precio alcanza a ser un 300 por ciento mayor al de su compra. "Las tortugas se adquieren a 1 o 2 pesos en el norte, pero en Europa llegan a venderse en en unos 300 dólares", indicó.
Las aves fueron soltadas a excepción de los loros, que tenían las alas cortadas y no hubieran podido sobrevivir. Ayer se encontraban en jaulas junto a las tortugas en la sede de Gendarmería, ubicada en San Martín y Virasoro, a la espera del traslado a un hábitat que les garantice la supervivencia.
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Unas 400 aves y 50 tortugas iban hacia Buenos Aires. |  | Ampliar Foto |  | |
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La Ciudad
