La historia volvió a repetirse. La lluvia que se desató ayer sobre la ciudad obligó a que 289 personas debieran ser evacuadas de sus hogares y alojadas en los pabellones del Batallón 121 de Comunicaciones. Muchas de ellas habían abandonado el cuartel un día antes, pero el agua volvió a jugarles una mala pasada. El temporal anegó distintos barrios a pesar de que la cantidad de agua caída no fue tan significativa. Desde las 7.15 y hasta las 15, los registros eran de 68 milímetros. En lo que se asemejó a una escena perfectamente calcada de lo que había sucedido horas antes, los colectivos volvieron a llegar hasta las puertas del destacamento militar transportando a mujeres y niños a quienes el agua había vuelto a causar un dolor de cabeza. Es que, a diferencia de muchos rosarinos que encontraron en el temporal de ayer un respiro a las altas temperaturas del fin de semana, a ellos la lluvia no les causó ningún alivio. Es más, el agua les llegó a las rodillas y se les metió en sus casas sin pedir permiso. "La verdad es que ya vivimos más acá que en nuestro barrio", señaló resignada y en las puertas del pabellón que había dejado el día anterior Marina Orellano, una joven mamá que sostenía en sus brazos a su bebé de 10 meses. "Lo que pasa es que cada vez que llueve nos inundamos", agregó María Salvatierra, otra vecina que ayer también debió ser evacuada. Tanto María como Marina llegaron al Batallón desde barrio Triángulo, uno de los sectores de la ciudad a los que el temporal les mostró su peor cara. Igual suerte corrieron los vecinos de Villa Banana, Empalme Graneros y Stella Maris, al tiempo que quienes viven en Nuevo Alberdi vigilaban con recelo, al cierre de esta edición, que el agua no desbordara los márgenes del arroyo Ibarlucea. Situación que sí se produjo en Juan B. Justo al 8600, donde el arroyo superó su cauce normal y la evacuación no se hizo esperar. Los casi 300 evacuados fueron asistidos en el Batallón 121 por personal de la Secretaría de Promoción Social municipal, Salud Pública, Servicios Públicos y Defensa Civil. Todos gozan de buen estado de salud y son asistidos en forma permanente por médicos y enfermeras En el cuartel militar se les entregó un colchón y una muda de ropa seca, zapatillas, y diversos elementos como pañales, toallas femeninas y productos para su higiene, al tiempo que también se les sirvió un almuerzo. Del total de evacuados, 124 pertenecen a Villa Banana y algunos sectores de barrio Triángulo, 69 a Empalme Graneros y 96 al barrio Stella Maris. Al cierre de esta edición, desde Defensa Civil consideraban como "muy probable" que se sumaran vecinos del barrio Nuevo Alberdi, que se alza a metros de los márgenes del arroyo Ibarlucea.
| |