Kabul, Afganistán. - El ejército religioso talibán habría destruido dos enormes estatuas antiguas de Buda con armas antiaéreas, según los primeros relatos de testigos procedentes de la zona. Otras estatuas de distintas partes del país fueron demolidas con cohetes, tanques y explosivos, despojando a la nación de las pruebas de su pasado preislámico. Ayer el representante especial de la Unesco, Pierre Lafrance, llegó a la ciudad de Kandahar, al sur de Afganistán, y se reunió con los máximos representantes talibanes en un último intento por detener la destrucción masiva de estatuas iniciada el viernes pasado.
Los residentes de la ciudad central de Bamiyán, donde las dos enormes estatuas de Buda fueron talladas en un risco en los siglos III y V, dijeron que los soldados talibanes empezaron a atacar las estatuas por lo menos hace tres días. "Pude ver a los soldados talibanes disparar armas antiaéreas contra las dos estatuas. Eso fue hace tres días", expresó ayer Safdar Ali que llegó a Kabul, la capital afgana desde Bamiyán, a 130 kilómetros de distancia. "Los soldados no nos dejaron acercar mucho así que no pude ver en qué medida fueron destruidas. Nos fuimos del lugar", expresó.
El régimen talibán, que implementa un estricto régimen islámico y domina la mayor parte del país, hizo caso omiso de los pedidos internacionales de que detuviera la destrucción de las reliquias del pasado preislámico. "No estamos contra la cultura, pero no creemos en estas cosas. Son contrarias al islamismo", expresó el ministro de Relaciones Exteriores, Wakil Ahmed Muttawakil en la sureña localidad de Kandahar, sede del ejército religioso talibán.
Deben ser destruidas
El enviado especial de la Unesco, Pierre Lafrance, fue informado el sábado por el embajador talibán en Pakistán, Abdul Salam Zaeef, que la destrucción no había comenzado aún. Pero Muttawakil dijo que la información de Zaeef estaba desactualizada y que la tarea de destruir las estatuas le fue confiada al Ministerio de Información y Cultura, Vicio y Virtud.
El titular, Quatradullah Jamal, le dijo el sábado que sus tropas habían destruido las dos terceras partes de todas las estatuas de Afganistán y grandes partes de las dos estatuas gigantes de Buda. "La información es exacta", dijo Muttawakil. "Para mañana (por hoy) -exactamente una semana después que el recluido líder talibán, el mulah Mohammed Omar, ordenó que fueran destruidas todas la estatuas- la tarea estará completa", expresó Jamal.
"Sólo Alá, el todopoderoso, debe ser venerado y esas estatuas deben ser destruidas para que no sean veneradas ni ahora ni en el futuro", dijo hace una semana el jefe del gobierno talibán, Mohamad Omar, al decretar la orden de destrucción.
Los dos Buda, de 53 y 36 metros de alto, ya habían sido deteriorados por la guerra. Los testigos que subieron hasta el tope de las estatuas dijeron que había nombres de soldados rusos, inscriptos después de la invasión soviética iniciada en 1979. Las cuevas formadas al pie de las estatuas fueron utilizadas por las familias de refugiados, y por los combatientes para almacenar armas. Se cree que una de las estatuas era la más alta del mundo de Buda de pie, en lugar de sentado. Pero Omar dictaminó que eran objeto de idolatría y contrarias a los principios del islamismo.