Racing Club obtuvo una victoria fundamental al vencer 2-1 a Boca Juniors para afirmarse en la tabla de posiciones con 8 puntos y alejarse de la tan temida zona de promoción en la de los promedios, pues su objetivo de máxima al finalizar esta temporada es mantener la categoría.
Más de 30 mil espectadores asistieron al triunfo albiceleste en el estadio Presidente Perón de Avellaneda, que justificó su éxito por lo producido durante el primer tiempo y los diez minutos iniciales del segundo.
Nicolás Burdisso abrió la cuenta a los 7'; José Chatruc igualó a los 43' a través de un penal precedido por una acción controversial que derivó en la expulsión de Jorge Bermúdez y, a los 77', cuando el trámite era sumamente equilibrado, Luis Rueda selló el marcador con una palomita excepcional.
Salvo el resultado parcial, que le fue adverso hasta dos minutos antes de la conclusión del primer tiempo, todos los demás ingredientes del clásico favorecieron al ganador al superar a Boca en la mitad de la cancha por la mayor movilidad de sus volantes.
Los locales se filtraban con facilidad por los costados, superando a los permeables Marchant y Pereda en dinámica y numéricamente, ya que se sumaba con oportunas proyecciones Carlos Arano.
Así, ante un Boca dividido en dos y aislado Riquelme de sus compañeros, el dueño de casa controló la pelota y dispuso de mayores y mejores situaciones de gol, pese a que su principal problema fue la aceleración del juego cerca del área boquense, por lo cual le faltó claridad en la definición.
Boca había logrado abrir muy temprano el marcador a través de una jugada de pelota parada, mediante un tiro libre de Riquelme -Gastón Sessa se confió por intuir que se trataría de un centro- que se estrelló en el palo derecho y del anticipo se adueñó Burdisso, quien con un zurdazo estableció el 1-0.
Tres minutos después, Burdisso volvió a erigirse como gran protagonista al rechazar sobre la misma línea de sentencia un remate de Rueda, luego de enfrentar a Abbondancieri.
Y, a los 33', tras un córner ejecutado por Maximiliano Estévez, Adrián Bastía cabeceó sin marcas y la pelota apenas se fue desviada, junto al palo izquierdo del arco xeneize.
El merecido empate fue producto de una acción que generó una gran polémica: el árbitro Claudio Martín expulsó a Jorge Bermúdez a instancias del primer árbitro asistente Darío García por supuesta infracción contra Chatruc dentro del área visitante, por lo cual sancionó penal que el propio mediocampista académico convirtió en empate.
Con un jugador menos y la reaparición de Riquelme en el desarrollo del juego, los xeneizes equilibraron el trámite y generaron mayor cantidad de situaciones propicias que en la primer mitad.
Racing también dispuso de chances concretas, como un derechazo de Chatruc y otro de Estévez que, mano a mano, tapó Abbondancieri.
El golpe de gracia, no obstante, lo dio Rueda con una palomita a los 77', tras un centro de Diego Milito que no pudo ser interceptado por Burdisso y Facundo Imboden.
Así Racing consiguió un éxito fundamental y le dio algo de alegría a su gente.
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La Ciudad
