Un joven armado junto a un cómplice que lo aguardaba en una moto asaltó una vinería del macrocentro rosarino. El dueño del comercio señaló que el local ya sufrió otros dos atracos en los últimos dos meses. Además denunció que, en el anterior robo, la policía atrapó a los ladrones, pero el dinero incautado a los asaltantes no "volvió a sus manos". El atraco ocurrió cerca de las 16.30 de ayer en la vinería Barcelona, situada en Córdoba y Santiago, cuando en el local se encontraba el propietario, Mariano Sebrie, de 29 años, con su madre, Graciela González. A esa hora Sebrie estaba atendiendo una comunicación telefónica cuando irrumpió un muchacho armado. "Le puso un revólver en el pecho y le pidió el dinero. Mi hijo sacó la plata de la caja y se lo dio", explicó González. Con el botín en su poder, unos cuatrocientos pesos, el ladrón escapó corriendo hacia la otra cuadra donde lo aguardaba un cómplice a bordo de una moto "sin patente" sobre la calle Santiago. Pero el comerciante decidió perseguirlo y logró alcanzarlo porque el rodado "no arrancó". "Mariano lo golpeó al ladrón. El tipo lo apuntó con el revólver y aparentemente forcejearon porque mi hijo tiene un hematoma", comentó. La sucesión de atracos, según relató la mujer, se inició el 24 de diciembre del año pasado. Ese día un hombre simulando ser un cliente inmovilizó a Sebrie, a su madre y a un cliente y se apoderó de la recaudación, unos 800 pesos, y de mercadería. "El ladrón me dijo que quería comprar un regalo y cuando se lo iba a entregar encañonó a mi hijo. Después nos obligó a tirarnos en el suelo y se llevó el dinero", dijo. El robo que precedió al de ayer ocurrió el 9 de enero pasado. Según contó González, "vinieron dos muchachos con fuerte olor a vino. Uno de los ladrones encerró a Mariano en el baño y cuando quiso hacer lo mismo conmigo les di toda la plata". La mujer indicó que poco después del atraco aparentemente dos agentes de la Brigada Motorizada apresaron a los autores del robo. Pero lo curioso del caso, según denunció Sebrie a Radio Dos, fue que los efectivos no le entregaron el dinero incautado. "Se la llevaron ellos. Es el arreglo de la policía con la delincuencia", afirmó.
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