Año CXXXIV
 Nº 49.039
Rosario,
domingo  25 de
febrero de 2001
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Barrio Acindar
Un comerciante frenó a un ladrón de un botellazo
Eran dos asaltantes y uno consiguió huir. Pero los vecinos retuvieron y casi lincharon al maleante herido

Un comerciante de barrio Acíndar que se resistió a un robo le arrojó un botellazo en la cabeza a un delincuente y logró que, al intentar huir, cayera al piso y fuera retenido por un grupo de vecinos que estuvieron a punto de lincharlo cuando llegaron los policías del Comando Radioeléctrico. En el violento asalto participó además un adolescente que también estaba armado, pero pudo escapar hacia una villa miseria cercana. La policía reportó el secuestro de un revólver calibre 38 que estaba en poder del maleante arrestado.
El episodio sucedió antenoche, alrededor de las 20.30, en el comercio de pasaje Ramón Lista 3778, zona sur de la ciudad. El local es propiedad de Gustavo Alonso, quien en el momento del asalto se encontraba junto a su madre, pero no había clientes. Los delincuentes llegaron en sendas bicicletas que dejaron apoyadas contra la pared del frente.
Apenas traspusieron la puerta extrajeron sus armas y amenazaron al dueño del local y a su madre. Según fuentes policiales, los dos cubrían sus rostros. El que parecía mayor lo hacía con una media tipo can can y una gorra blanca.
Los delincuentes actuaron rápido. El más chico de contextura física se dirigió hacia la caja donde estaba el dinero, mientras su cómplice tenía amenazados a Alonso y a la mujer. Pero cuando estaba a punto de retirarse, el hombre que cubría su cara con la media le aplicó un terrible golpe con la culata de su revólver al comerciante como forma de amedrentamiento.
Las fuentes consultadas dijeron que el dueño de la granja, a pesar del magullón en la cabeza, reaccionó con rapidez. En una fracción de segundo tomó una botella de vino tinto 3/4 de la estantería y sin dudarlo se la arrojó al maleante que en ese momento retrocedía hacia la calle. El envase impactó en la cabeza del ladrón justo cuando estaba por subirse a su bicicleta, mientras el cómplice lograba evadirse llevándose alrededor de 90 pesos.
El delincuente, con una herida cortante en el rostro, alcanzó a pedalear unos pocos metros, pero no pudo mantener el equilibrio y cayó al piso. Voceros de la seccional 18ª, en cuya jurisdicción ocurrió el hecho, contaron que toda la acción fue presenciada por un grupo de vecinos, quienes al ver al ladrón sobre el pavimento estuvieron a punto de lincharlo.
Las fuentes consultadas dijeron que fue el propio Alonso y varios vecinos "quienes lograron reducir" al maleante cuando llegó una patrulla del Comando Radioeléctrico. El delincuente fue identificado como Sergio Peralta, de 43 años, quien tuvo que ser llevado al Hospital de Emergencias por una herida cortante en el rostro, que no era de gravedad. Después quedó alojado en la seccional 18ª imputado de robo calificado a disposición del juez de instrucción Alfredo Ivaldi Artacho.


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