Investigarán ilícitos relacionados con Perel

Se busca hallar el móvil del crimen en los presuntos delitos. Involucrarían a bancos y empresas

La fiscal que investiga los crimenes de Mariano Perel y su esposa Rosa en Cariló enviará a la Justicia nacional fotocopias certificadas de lo hallado en 25 cajas secuestradas en una oficina del ejecutivo para que se rastreen presuntos delitos económicos surgidos de esos documentos, que involucrarían a bancos y empresas. Desde mañana, la fiscal Claudia Castro comenzará a remitir copias certificadas de estos documentos a la Procuración de la provincia de Buenos Aires, para que a su vez ésta las gire a la Nacional y desde allí se impulse la investigación de presuntos ilícitos como evasión fiscal, fraude y lavado de dinero para eludir impuestos, revelaron fuentes allegadas a la causa.
Es en estos movimientos que, se cree, Perel realizaba para bancos y empresas donde se busca el móvil del crimen del ejecutivo y su esposa Rosa, cometido el 4 de febrero último en una cabaña de la localidad balnearia de Cariló.
La decisión de la fiscal de Dolores se enmarca en lo declarado anteayer por el Procurador bonaerense Eduardo Matías de la Cruz, quien anticipó que detrás del crimen de Perel se esconde una trama de "estafa al pueblo argentino" a través de fraudes y evasiones impositivas de grandes empresas y bancos de primera línea.
Toda la documentación que llegará así a manos del Procurador nacional Carlos Becerra fue secuestrada en 25 cajas que el empresario asesinado guardaba en una oficina del segundo piso de Perón 935, de Capital Federal.
Este lugar era prácticamente desconocido para sus allegados y está ubicado frente a la sede del último trabajo conocido de Perel, la empresa Antfactory.
En cuanto a la trama en sí del asesinato, los pesquisas reconstruyeron casi completamente los pasos previos de Mariano y la psicóloga Rosa de Perel antes de aparecer baleados en la nuca sobre la cama matrimonial de la cabaña 32 del complejo Puerto Hamlet.
Según la pesquisa, el ejecutivo había llevado desde Capital Federal fueron las tres botellas del vino Felipe Ruttini encontradas en la cabaña. En este punto volvió a aparecer la hipótesis de una o más personas invitadas para esa noche al asado de los Perel. "En el hotel sólo había Chandon o Valmont, de los tickets encontrados surge que no lo compraron en Cariló y ahora se busca saber si lo pagó con su tarjeta de crédito", explicaron las fuentes. Todos recuerdan en Dolores los dichos del hijo mayor del matrimonio: Su padre nunca compraba vino de primera calidad a no ser que pensara ofrecerlo a invitados.